Cinco ciudadanos rumanos que viven en Queens (NYC) fueron detenidos como sospechosos de robar cientos de miles de dólares a más de 600 personas desprevenidas en cajeros automáticos ATM, según los fiscales federales.
Ioan-Anton Gherasim (38), Elvis Dan Atomei (34), Dan Adrian Agafitei (25), Bobi Borcea (49) y Razvan Vicol (36) idearon un plan para instalar dispositivos de lectura y cámaras en cajeros automáticos, sostienen los fiscales. En una ocasión al parecer Vicol robó $4,000 dólares e intentó obtener $5,000 más durante un retiro de efectivo que duró siete minutos en un sólo día, el 16 de febrero, detalló Patch.com.
Los cinco presuntos estafadores fueron arrestados el jueves y acusados de fraude y robo de identidad agravados después de una amplia investigación realizada por investigadores del FBI, el Servicio Secreto y la policía de Nueva York sobre robos entre mayo de 2022 y febrero de 2023, dijeron las autoridades.
Pero las redadas del jueves 29 de febrero demostraron que los crímenes continuaron hasta este año: esa mañana los agentes atraparon a uno de los acusados con un escritorio lleno de herramientas de dispositivos de robo de cajeros automáticos, según los documentos.
“Los cinco acusados supuestamente obtuvieron ilegalmente información financiera utilizando dispositivos ocultos implantados en cajeros automáticos para crear tarjetas de débito falsificadas y robar miles de dólares de más de 600 víctimas desprevenidas”, dijo en un comunicado James Smith, subdirector del FBI a cargo de la oficina de campo de Nueva York.
Se trata de dispositivos delgados insertados en ranuras para tarjetas de débito o crédito que capturan y almacenan datos de las tarjetas. Y cuando se combinaban con los números PIN capturados por las cámaras ocultas, los estafadores acusados podían fabricar tarjetas falsificadas y retirar dinero o realizar transacciones, afirman los documentos.
odos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.
Se trata de robos más sofisticados de los tradicionales asaltos a usuarios de cajeros ATM e incluso de las máquinas. En junio dos osados ladrones se llevaron unos $100,000 dólares en un robo a plena luz del día cuando un empleado surtía de dinero cajeros automáticos ubicados en negocios particulares en El Bronx. En mayo un ladrón armado se llevó un cajero automático completo de una bodega en Queens.