En medio del actual conflicto con Rusia, se informa que el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky está planeando la mayor reorganización en el mando militar de Ucrania desde que comenzó la invasión a gran escala hace dos años.
Esta medida implica la sustitución del comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Valeriy Zaluzhny, según dio a conocer Financial Times.
La oferta de Zelensky de un nuevo papel como asesor de defensa del general Zaluzhny ha sido rechazada, según fuentes familiarizadas con las discusiones. A pesar de la negativa del general, parece que Zelensky está decidido a destituir a Zaluzhny de su puesto actual.
Según se informa, la relación entre ambos ha sido tensa, particularmente después de la contraofensiva de Ucrania en noviembre pasado, que no cumplió con sus ambiciosos objetivos. Esto provocó desacuerdos públicos, y la oficina de Zelensky criticó a Zaluzhny por sus comentarios sobre el progreso de la guerra.
Impacto potencial de la destitución de Zaluzhny
La destitución del general Zaluzhny podría tener importantes repercusiones dentro de la sociedad civil y militar de Ucrania. Es una figura muy respetada y goza de más confianza pública que el presidente Zelensky, según encuestas recientes.
El historiador militar Mykhailo Zhyrokhov ha expresado su preocupación por el posible impacto negativo en la moral del ejército.
Además, reemplazar a Zaluzhny podría inquietar a los socios occidentales de Ucrania que han estado colaborando estrechamente con él en estrategias en el campo de batalla.
Incertidumbre sobre el sucesor de Zaluzhny
Si bien se especula sobre el despido de Zaluzhny, no hay indicios claros de quién podría sucederlo como comandante en jefe. Los candidatos potenciales incluyen a Oleksandr Syrsky, comandante de las fuerzas terrestres de Ucrania, y Kyrylo Budanov, jefe de la dirección de inteligencia militar, quienes se dice que son cercanos a Zelensky.
Al general Zaluzhny, nombrado por Zelensky en julio de 2021, se le atribuyen varios éxitos militares, incluida la defensa de Kiev y contraofensivas exitosas en Járkov y Jersón.
El conflicto actual entre Ucrania y Rusia, que comenzó en 2014 con la anexión de Crimea por parte de Rusia y se intensificó con la invasión a gran escala de Ucrania por Rusia en 2022, representa una de las crisis geopolíticas más graves en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Esta confrontación ha tenido profundas implicaciones internacionales, desestabilizando la seguridad regional y desafiando el orden mundial establecido en la posguerra.
La invasión rusa ha sido ampliamente condenada por la comunidad internacional y ha llevado a una serie de sanciones económicas severas contra Rusia.
El conflicto ha provocado una crisis humanitaria significativa en Ucrania, con miles de civiles muertos y millones desplazados, tanto dentro del país como en naciones vecinas.
Las ciudades ucranianas han sufrido daños extensos debido a los bombardeos y los combates, exacerbando la situación de los ciudadanos afectados.
A nivel geopolítico, este conflicto ha llevado a un reajuste significativo de las alianzas y estrategias de defensa en Europa. La OTAN y varias naciones europeas han aumentado su apoyo militar y humanitario a Ucrania, fortaleciendo su presencia en la región del Este de Europa como respuesta a la agresión rusa.
