Un barco de la Guardia Costera libia arremetió contra una pequeña embarcación con decenas de migrantes a bordo y disparó armas de fuego hacia ella. Los hechos, ocurridos este miércoles en aguas internacionales del Mediterráneo, a unos 64 kilómetros al sur de Malta, fueron reportados por la ONG alemana de rescate marítimo Sea-Watch.
En las imágenes captadas por la organización durante una expedición de monitoreo aéreo, se puede observar al buque Ras Jadir 648 acercarse en repetidas ocasiones de forma peligrosa a la barca de madera y efectuar al menos dos disparos contra bote con 45 migrantes a bordo en lo que, se presume, fue un intento fallido de impedir que continuara su camino rumbo a Europa.
De acuerdo a la organización, citada por AP, la tripulación del avión de vigilancia Seabird pidió por radio al barco detener inmediatamente los disparos y la persecución, a lo que los oficiales respondieron asegurando que se trataba de una misión de rescate. Sin embargo, los hechos ocurrieron en un área marítima en la que las operaciones de búsqueda y rescate son responsabilidad de las autoridades de Malta.
UPDATE: The boat that the so-called Libyan Coast Guard tried to intercept by firing gunshots in the SAR zone of #Malta was able to escape. The 45 people on board need immediate rescue and a place of safety, they are just 35 nautical miles from Lampedusa. pic.twitter.com/R8DmSp62Hg— Sea-Watch International (@seawatch_intl) June 30, 2021
Según denunció la ONG, este tipo de operaciones responden a los intereses de la Unión Europea, quien otorga financiamiento, entrenamiento y equipo, incluidas embarcaciones, a la Guardia Costera del país norteafricano a cambio de impedir que los migrantes consigan llegar a las costas europeas.
Peter Stano, portavoz de la Comisión Europea, condenó lo ocurrido y lo calificó como “un motivo de preocupación” que deberá ser explicado por la nación africana. “Estamos comprobando los hechos y las circunstancias que hay detrás de ese suceso y, desde luego, vamos a seguirlo muy de cerca. Y pediremos explicaciones, pero también llevaremos a cabo una investigación sobre lo ocurrido”, comentó el funcionario.
Por su parte, la Marina de Libia reconoció haber puesto en peligro la vida de los migrantes con las maniobras de persecución y con los disparos de advertencia. Asimismo, reiteró su rechazo a “cualquier acto que viole las normas y leyes locales e internacionales”, por lo que adelantó que habrá consecuencias contra los responsables.
Tras lograr escapar de sus perseguidores, los migrantes continuaron con su camino y arribaron a salvo el jueves por la mañana a la isla italiana de Lampedusa, popular puerto de entrada hacia Europa.
