Venezuela se prepara para celebrar este domingo las elecciones más transcendentales de la última década en el país, en las que competirán por la Presidencia diez candidatos, entre los que se elegirá la continuidad del chavismo, en el poder desde hace 25 años, o un Gobierno de signo opuesto.
A pocas horas de la apertura de los 15.767 centros electorales, prevista para las 6:00 hora local (10:00 GMT), la expectación crece ante unos comicios en los que la oposición mayoritaria participa –con Edmundo González Urrutia como abanderado-, por primera vez desde las parlamentarias de 2015, cuando ganó.
Además del candidato de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) -la principal coalición antichavista-, compite el actual jefe de Estado, Nicolás Maduro, quien busca un tercer sexenio consecutivo en el poder.
Los más de 21 millones de electores censados también podrán elegir entre el pastor evangélico Javier Bertucci, el comediante Benjamín Rausseo, los exalcaldes Daniel Ceballos y Claudio Fermín, el exconcejal Antonio Ecarri, los diputados Luis Eduardo Martínez y José Brito y el exrector electoral Enrique Márquez, el más cercano a la oposición mayoritaria.
Voto en el exterior
En el exterior, podrán participar 69.211 venezolanos, una mínima parte de los aproximadamente 4 millones en edad y condiciones de votar, extraídos de los más de 7 millones que emigraron, según datos de la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de la ONU, cifra que el Gobierno reduce a unos 2 millones.
Los migrantes podrán sufragar en 104 representaciones diplomáticas y consulares venezolanas en el mundo, dijo este sábado a EFE la presidenta de la Comisión de Participación Política y Financiamiento del Consejo Nacional Electoral (CNE), Aime Nogal.
El chavismo y la oposición llamaron, reiteradamente, a votar y a cuidar y defender cada uno de los sufragios, que definirán, según las partes, el destino del país, aún en crisis pese a mejoras económicas en el último trienio, que no han logrado detener la migración.
La comunidad internacional, que acoge a millones de venezolanos, observa con atención este proceso, sobre todo luego de una campaña electoral -finalizada el pasado jueves- con múltiples denuncias por parte del antichavismo mayoritario de detenciones, obstáculos y «amenazas», entre otras.
Diversos países de la región manifestaron su «preocupación» al respecto, así como su deseo de que el proceso electoral se desarrolle de manera pacífica y que el resultado sea respetado por las partes.