¿Qué futuro le espera a Melania Trump?
Melania Trump acompaña estos días a su marido en un tormentoso final de mandato: asalto al Capitolio, impeachment, críticas de adversarios y aliados políticos. Y, de nuevo, todo tipo de especulaciones se han desatado con respecto al futuro de Melania Trump fuera de la Casa Blanca: ruptura matrimonial, un paso a la primera línea política, el regreso al anonimato, retirada de la esfera pública… Pero ¿cuál es la realidad?
Melania Trump apoya (de momento) a su marido
De momento no hay ruptura. Melania Trump se mantiene firme junto a su esposo. Todavía en su papel de Primera Dama lanzó un comunicado condenando la violencia que se desató en Washington D.C. pero, a la vez, colocándose en el papel de víctima por supuestos ataques injustificados. El comunicado fue considerado ambiguo y tibio, más propio del tono de Donald Trump que de la exquisita neutralidad con la que se ha manejado Melania Trump como Primera Dama. Un cargo que, tal y como relatamos a continuación, estuvo a punto de no aceptar.
La mujer que no quería ser Primera Dama
Diversos testimonios aseguran que Melania Trump jamás quiso que su marido ganase las elecciones. En su libro ‘Fire & Fury: Inside the Trump White House’ el periodista Michael Wolf cuenta cómo Melania Trump rompió a llorar cuando supo que su marido había ganado las elecciones. “Y no eran lágrimas de alegría”, escribió Wolf.
Todo por su hijo Barron
Ni tan siquiera el propio Donald Trump esperaba la victoria pero, una vez lograda la presidencia, tocaba mudarse a la Casa Blanca. Numerosas voces cercanas a Melania Trump aseguran que ella accedió a ejercer el papel de Primera Dama por su hijo Barron, un adolescente a quien ella protege a toda costa.
Renegociación del acuerdo prenupcial
Según se publicó en ‘The art of her deal: The untold story of Melania Trump’, libro de Mary Jordan, periodista de The Washington Post, Melania Trump renegoció su acuerdo prenupcial cuando su esposo ganó las elecciones y blindó los derechos de su hijo antes de aceptar ser Primera Dama.
#FreeMelania
Desde el primer momento hubo una cierta corriente de simpatía hacia Melania Trump incluso entre quienes detestaban a su esposo como presidente. Y se llegó a acuñar el hashtag #FreeMelania, que sugería un retrato de la Primera Dama como mujer sometida a Donald Trump. Es verdad que las cámaras cazaron a Trump con gestos autoritarios hacia su mujer pero ella siempre se mantuvo firme en su rechazo a obedecerle (eso también lo captaron las cámaras) y como Primera Dama mostró su autonomía.
Ella sí lleva mascarilla
Un ejemplo de que Melania Trump tiene su propio estilo es que durante la pandemia sí se ha mostrado en público con mascarilla frente a la negativa de su esposo a ponérsela. Donald Trump se infectó de Covid 19 y Melania no.
Un divorcio que nunca llegó
Durante la presidencia de Trump se especuló con un hipotético divorcio en la Casa Blanca. Fue, incluso, objeto del argumento de uno de los episodios de la serie ‘The Good Fight’. Pero tal cosa nunca se produjo y quienes conocen tanto a Melania como a Donald Trump aseguran que una ruptura entre ambos sería enormemente difícil. Por cuestiones de poder, de dinero y personales.
¿Una futura líder?
En cuanto a que Melania Trump juegue un papel político en el lado conservador y se convierta en líder, tampoco resulta probable. Su carisma es innegable pero también su escaso interés real por la política.
Su papel como Primera Dama
Melania Trump no ha sido una Primera Dama como Hillary Clinton (que impulsó reformas políticas) o Michelle Obama (activista medioambiental o de los derechos de la infancia). Su papel ha sido más tradicional pero los analistas coinciden en que ha logrado salir airosa en el loco contexto creado por Trump en la Casa Blanca.
Regreso al anonimato
Quizá querría Melania Trump volver a cierto anonimato, pasar página a su periodo de Primera Dama. Una vez asumida la salida de la Casa Blanca, este será un futuro muy probable. ¿Y dónde irían a vivir los Trump en su retiro de la política?
Los vecinos de Trump no le quieren
Se dice que Trump no quiere volver a su lujosa vivienda de Nueva York porque está resentido con una ciudad progresista donde se vota mayoritariamente demócrata y siente que le odian. Planearía dejar la Trump Tower por su mansión en Florida pero allí también tiene problemas…
Trump no es bienvenido en Mar-a-Lago
Trump tiene una inmensa mansión en Mar-a-Lago, una exclusiva zona de Palm Beach. Pero allí hay residentes que ya están maniobrando y han presentado alegaciones ante la alcaldía para que Trump no se instale en este lugar. Creen que puede causarles problemas de seguridad y romper la tranquilidad de ese entorno. Y pueden haber encontrado el modo de evitar que Trump se mude allí: la mansión de Mar-a-Lago está declarada como club (así lo hizo el magnate en una de sus bancarrotas para proteger la propiedad) y, si es un club, legalmente nadie puede residir más de 21 días al año.
Melania sólo quiere volver a un hogar
Sea donde sea, en Nueva York o Florida, según recogió la CNN, el estado mental de Melania Trump se resume en una frase: “Just wants to go home”. Así lo ha declarado un familiar cercano. Volver al hogar y alejarse del huracán que es la política en Estados Unidos.
Fin de etapa
De hecho, según han publicado diversos medios, Melania Trump no fue la única que ayudó a convencer a su marido para que aceptara el final de la etapa presidencial y, ahora, comiencen un capítulo nuevo.
¿Volverá a ejercer como modelo?
También se ha publicado que Melania Trump sueña con volver a ejercer su profesión de modelo una vez abandone la Casa Blanca. Lo cual significaría también recuperar un papel absolutamente autónomo de su marido.
La nueva Melania Trump
Lo cierto es que se abre una oportunidad para que Melania Trump pueda reinventarse. Para que conozcamos a la nueva Melania Trump. Por cierto, ¿conoces la biografía y orígenes de Melania Trump?