Cuando me hice de locutor, por allá por el año de 1975, estaban de moda los cantantes que cantaban canciones con contenido revolucionario y sociales, se llamó a esa generación de artistas, la nueva trova.
Dentro de esos cantantes,había una española que cantaba una hermosa canción titulada » De Dignidad se Trata».
Gloria Martin evocaba en esa canción,lo valiosa que es la dignidad en una persona.
Hoy en día vemos como muchos políticos han ido perdiendo la dignidad,la decencia y el honor, por ir detrás dinero fácil, se venden como cualquier mercancía,se pesan por libra.
Traicionan los ideales de sus líderes políticos, a quienes votaron por ellos y a los colores de sus partidos, no tienen vergüenza ni escrúpulos para mudarse a otro partido,son como reptiles y camaleones, cambian de piel y de colores,como cambian de ropas interiores.
Esa fea práctica de comprar dirigentes opositores,la inició Balaguer, la continuó Leonel Fernández y Danilo Medina.
El PLD destruyó dos partidos políticos comprándole dirigentes, el Partido Reformista y al PRD, ahora la compra de dirigentes la está profundizado este gobierno,comprando a todo aquel que esté a la venta en todo el país.
Muchas personas se meten a político, aspiran a una posición dentro de su partido, si pierden van a negociar con el partido de gobierno por millones de pesos, ya la política no es una actividad para servir,es más bien una actividad para muchos servirse de ella,de lucrarse y sacar mucho dinero.
Lo peor es que a quienes compran, lo hacen con el dinero del pueblo, eso afecta a nuestra sociedad y a muchas personas que pueden ver truncadas algunas obras de desarrollo en sus comunidades,por el uso del dinero para comprar dirigentes políticos.
Aunque los compradores de dirigentes opositores no lo crean, esa práctica no da buenos resultados, la población votante rechaza en las urnas a los vendidos, los repugnan y los aborrecen.
No es verdad que los vendidos aportan mucho a la organización que se vendieron, la mayoría de sus seguidores no se van con ellos, porque dicen que estos cogieron su dinero,pero que a quienes les seguían, no le dieron nada.
Cada vez que escucho o leo la noticia de que X dirigente opositor,se juramentó en el partido de gobierno, viene a mi memoria la historia del filósofo griego llamado Diógenes.
A la luz del día con una lámpara encendida, buscaba entre la gente un hombre honesto.
Será muy difícil en el futuro, buscar un político honesto,digno y decente,que no sucumba ante la tentación del ofrecimiento de los millones de pesos.
Juan Bosch, un referente de politico con dignidad y moral, una vez dijo que la dignidad nunca muere,lo malo es que muchos políticos nacieron sin dignidad,decencia y honestidad.
Por Roberto Paulino
