El Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) informó a Diario Libre que, siguiendo el protocolo y debido a la falta de algunas partes del cuerpo de la mujer desmembrada por su pareja en San Cristóbal, no han podido entregar el cadáver a sus familiares.
Sin embargo, ante al tiempo transcurrido desde el crimen y el hallazgo de partes del cuerpo en una cañada el pasado 25 de mayo, el órgano forense se comunicará con los familiares para coordinar la entrega del cadáver de Eduarda Díaz, siempre y cuando ellos estén de acuerdo.
Precisaron que, de aparecer las partes del cuerpo que faltan, se realizaría la entrega adicional, lo que ameritaría otro protocolo.
Al conversar con el hermano de la víctima, Carlos Guzmán, este indicó que está de acuerdo con la entrega del cadáver, a pesar de que no esté completo, ya que él y su familia desean darle una sepultura digna.
Precisó que cuando encontraron el cuerpo de su hermana en el lugar al que el propio asesino, José Osvaldo Cuevas, lo dirigió junto con las autoridades policiales, él pudo reconocer que se trataba de su hermana.
Relató que su familia tuvo que realizar un acto fúnebre sin el cuerpo ante el protocolo llevado en este caso por las autoridades pertinentes.
En tal sentido, Guzmán dijo que tiene todos los preparativos para recoger el cuerpo de su hermana Eduarda en la morgue del Inacif y darle sepultura de inmediato en el cementerio municipal de Doña Ana, en la provincia San Cristóbal.
La mujer estaba embarazada de cinco meses y dejó en la orfandad a tres hijos menores de edad, uno de ellos procreado con su asesino.
