Después de un primer tiempo cerrado, que terminó igualado sin goles entre Argentina y Colombia, la final de la Copa América tuvo un show que dio que hablar en el entretiempo. Al mejor estilo de los grandes espectáculos del deporte en los Estados Unidos, Shakira fue la encargada de hacer bailar a las miles de personas presentes en el Hard Rock Stadium de la ciudad de Miami.
Antes que la cantante colombiana hiciera su aparición, el que se mostró en escena frente al público fue Michael Buffer. El histórico presentador de las veladas más icónicas del boxeo se encargó de gritar frente al público su ya clásico “Let’s get ready to rumble”, que repite al principio de los combates que presenta y que significa “¡Prepárense para la pelea!”.
Luego de la frase, Shakira hizo su presentación junto a más de una decena de bailarines y cantó Hips Don’t Lie, uno de sus últimos hits. El show de la artista pop se extendió por unos 10 minutos, pero el total del espectáculo durante la pausa previa al inicio del complemento duró un total de 24 minutos, debido a que se tuvo que montar y desmontar el escenario. Entre los hits que cantó la colombiana, también se destacaron “Será, será”, “Te felicito” y “Puntería”.
Hay que remarcar que después de las sanciones que la Conmebol ejecutó contra varios de los entrenadores de las selecciones como el caso de Lionel Scaloni (Argentina), Bocha Batista (Venezuela), Ricardo Gareca (Chile) y el propio Marcelo Bielsa (Uruguay), por ingresar después del tiempo estipulado al segundo tiempo de los partidos en la fase de grupos, la entidad encargada de la organización de la Copa América decidió que fuese casi el doble de duración el entretiempo en la final por el show que protagonizó Shakira.
Además de la presentación de la artista de 47 años nacida en Barranquilla, el espectáculo incluyó la aparición en varias ocasiones del mapping que mostró a cuatro helicópteros, una loba -en referencia a la cantante- y otras demostraciones realizadas con proyecciones de vídeo para desplegar una animación o imágenes sobre el campo de juego el recinto elegido para la definición de la Copa América.
El comienzo del juego entre argentinos y colombianos se retrasó una hora y 20 minutos por graves incidentes que se produjeron en las adyascencias del estadio. Las imágenes de decentas de fanáticos colombianos intentando burlar a la seguridad para ingresar sin entrada a la cancha se fueron replicando conforme pasaron los minutos. Desde la Conmebol explicaron que esta fue la chispa que incendió todo y llevó a los encargados del operativo a blindar las compuertas de acceso.
Hasta los últimos instantes del inicio, cuando la Conmebol ya había anunciado el horario de arranque del duelo entre Argentina y Colombia se registraron imágenes bochornosas, como la de personas queriendo ingresar por los conductos de la ventilación o con un sector del público formando parte en pleitos por una butaca en el Hard Rock Stadium. Sin importar los protocolos, los fanáticos fueron protagonistas de un hecho repudiable que quedará para el olvido, lo mismo que el nivel de organización de la entidad que rige los destinos del fútbol en Sudamérica durante todo el torneo.
