Silfredo Castillo Martínez, un hispano dueño de una guardería en el Bronx, Nueva York, se declaró culpable el jueves de abusar sexualmente de un niño de 11 años bajo su cuidado. Asimismo, según el Departamento de Justicia, el hombre poseía casi 10,000 imágenes de material de abuso sexual infantil.
“Silfredo Castillo Martínez aprovechó la confianza depositada en él como proveedor de guardería al abusar sexualmente de uno de los niños menores bajo su cuidado y obligarlo a realizar actos sexuales con él”, dijo Damian Williams, Fiscal Federal para el Distrito Sur de Nueva York, según un comunicado.
Y añadió: “La conducta de Castillo Martínez es reprensible y ahora enfrenta más de una década de prisión por sus crímenes”.
Los hechos, según un comunicado del Departamento de Justicia, ocurrieron al menos desde mayo de 2018 o alrededor de esa fecha hasta julio de 2018.
Sobre el caso
Según documentos judiciales, Google dio al Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados un aviso el 25 de abril de 2022 de que un usuario había subido lo que parecía ser material de abuso sexual infantil.
Gracias a ello, las autoridades localizaron a Castillo en su casa en Decatur Avenue, en el distrito del Bronx. Desde allí dirigió una guardería con licencia para cuidar a niños de entre 6 semanas y 12 años.
El Departamento indicó que a principios de mayo de 2022 agentes del orden ejecutaron una orden de allanamiento en la residencia del hombre, de 34 años de edad, y confiscaron varios dispositivos electrónicos. Esos dispositivos contenían, entre otras cosas, varias imágenes y un vídeo que contenía pornografía infantil que representaba a la víctima y aproximadamente otras 9,800 imágenes que representaban pornografía infantil.
Ahora Castillo Martínez enfrenta una sentencia mínima obligatoria de 15 años de prisión y una sentencia máxima de 30 años de prisión. Está programado para ser sentenciado por el juez Engelmayer el 25 de junio de 2024.
Las posibles sentencias mínimas y máximas en este caso están prescritas por el Congreso y se proporcionan aquí únicamente con fines informativos, ya que cualquier sentencia del acusado será determinada por el juez.
