Tehuel de la Torre, un joven trans de 22 años, salió el 11 de marzo de su casa ubicada en la localidad de San Vicente, en la provincia de Buenos Aires, para ir a buscar trabajo.
Desde entonces, no se sabe nada de él. Su mamá y su novia, con quienes vive, encabezan la campaña para reclamar por su búsqueda y aparición y a la que se han sumado organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales.
Luego de una serie de allanamientos policiales, ya fueron detenidos Luis Alberto Ramos, el hombre de 37 años que le ofreció trabajo como mozo y con quien se reunió el día de la desaparición, y Oscar Montes, quien también participó de ese encuentro. Los dos están acusados de falso testimonio y encubrimiento porque primero, en calidad de testigos, negaron haber visto a Tehuel.
🔴40 DÍAS SIN TEHUEL🗣️Exigimos la aparición con vida de Tehuel De La Torre, urgente.Su familia, su pareja, sus amigues, lo siguen buscando y piden visibilizar el caso. Desapareció el 11 de marzo y nunca más se lo volvió a ver. pic.twitter.com/BYizomxcZ6— Amnistía Internacional Argentina (@amnistiaar) April 20, 2021
Sin embargo, las investigaciones demostraron que sí se habían reunido. Incluso en el teléfono de Ramos apareció una foto que los tres se tomaron en casa de Montes ese 11 de marzo.
El resultado es que, 41 días después, el joven no aparece. Su rostro colma cada tanto las redes sociales, su nombre se vuelve tendencia, el caso se invisibiliza en los medios masivos de comunicación y pone en evidencia la vulnerabilidad de la comunidad trans en Argentina, en donde, al igual que en el resto del mundo, padecen más complicaciones para sobrevivir y conseguir trabajos estables.
Por eso, Amnistía Internacional exigió una investigación independiente, efectiva, imparcial y con perspectiva transfeminista; que se lleve a los responsables de su desaparición ante la justicia y que se aplique de inmediato el decreto de cupo laboral travesti-trans-no binario que el presidente Alberto Fernández firmó el año pasado.
#DondeEstaTehuel:Porque se cumple un mes desde la desaparición de Tehuel de la Torre pic.twitter.com/kuyG8NjGf8— ¿Por qué es tendencia? (@porquetendencia) April 11, 2021
«Nadie debería ir con miedo a una entrevista de trabajo por no ser cisgénero (personas cuya identidad de género corresponde a la que tuvieron al nacer). Las personas trans tienen derecho a habitar todos los espacios sin temor, violencia ni discriminación«, advirtió.
Pistas
Aunque se ha especulado con que Tehuel podría haber sido víctima de trata de personas, hasta ahora la causa sigue caratulada como «averiguación de paradero». La inició su novia el 14 de marzo, tres días después de la desaparición.
Gracias a su testimonio se pudo allanar la casa de Ramos, ya que, al despedirse, Tehuel le dijo en dónde y con quién iba a reunirse para responder a la oferta laboral. Las pericias de los teléfonos secuestrados todavía no se han dado a conocer.
🏳️⚧️🇦🇷Ya pasaron 41 días desde la última vez que hubo noticias de #Tehuel de la Torre.✊🏾🖊️Escribe el activista Ese Montenegro: «La desaparición de Tehuel nos interpela, nos angustia, nos llama a la crítica». 📢¿Dónde está Tehuel?📲https://t.co/GQc1ehFhknpic.twitter.com/pWr3O2cWlv— Agencia Presentes (@PresentesLGBT) April 21, 2021
Mientras se mantiene la campaña en reclamo por su aparición con vida, la provincia de Buenos Aires ya ofreció una recompensa de dos millones de pesos (alrededor de 22.000 dólares) para quienes aporten datos que permitan encontrar al joven.
Fernando Martín, integrante de la organización Hombres Trans Argentinos, le explicó a la Agencia Presentes que Tehuel es la cara de la invisibilidad que sufren los varones trans y de las violencias que atraviesan a lo largo de su vida.
«Muchas veces trabajamos en espacios violentos y trabajamos en lo que podemos y en lo que nos dejan. Se nos asigna el género femenino al nacer y somos ‘las locas’ de la familia, hacemos la transición y la paternización sigue estando. También sufrimos la expulsión de nuestros hogares y nos violentan dentro de esos hogares», dijo.
Además, agregó, las transmasculinidades también tienen dificultades para acceder al sistema laboral. «Nos filtran en los exámenes preocupacionales si es que tenemos un cispassing (si estamos hormonados). Pero no todos los compañeros están en ese proceso y a lo largo de esa transición se sigue produciendo exclusión. Trabajamos en lo que podemos y en lo que nos dejan y claramente Tehuel es una víctima de eso, porque muchos tenemos suerte o nos violentaron y la podemos contar, pero este no es el caso«, lamentó.