Un empresario millonario italiano permanece detenido en Milán, acusado de haber drogado y violado a una joven de 18 años durante una fiesta en su lujoso apartamento de esa ciudad del norte de Italia. Se trata de Alberto Genovese, quien se hizo conocido por crear Facile.it, sitio de Internet de seguros para vehículos, que vendió en 2014 por 100 millones de euros.
De acuerdo con la denuncia que llevó a su detención el sábado 7 de noviembre y posterior traslado a la cárcel de San Vittore, el ataque sexual ocurrió el 10 de octubre en una de las celebraciones organizadas por el emprendedor en las que, de acuerdo con medios italianos, solamente se puede asistir con invitación y en la puerta se deben dejar los teléfonos celulares para que no quede registrado lo que ocurre en el interior.
Según expresó el juez de instrucción, Tommaso Perna, «Genovese actuó independientemente del consentimiento de la víctima, que estuvo inconsciente alrededor de la mitad de las 24 horas que pasó con él, tanto que en algunas situaciones parecía un cuerpo sin vida, movido, removido, posicionado, tendido, volteado, abusado, como si fuera una muñeca de trapo».
Además, detalló que cuando la joven «recuperaba un poco la lucidez, intentaba resistirse, comenzaba a oponerse y suplicaba a su agresor que se detuviera». Sin embargo, su reclamo no fue escuchado y el hombre continuó «drogándola y violándola», mostrando «absoluto desprecio por la vida humana, especialmente la de las mujeres».
Tras conocerse este caso, surgieron varios testimonios de supuestas víctimas de Genovese que lo acusaron de actuar de la misma manera. Una de ellas contó que tras una celebración en Ibiza se despertó sin recordar qué le había pasado, aunque sospechaba que «había sido violada», pero con «consecuencias físicas menos dramáticas” que las sufridas por la joven en Milán. Además, recordó que «la cocaína mezclada con anfetaminas siempre se colocaba en platos a disposición de los invitados».
El descargo
Al ser interrogado por el juez tras su detención por la fiesta en su apartamento, Genovese afirmó que pretendía desintoxicarse porque es «adicto a la cocaína desde hace cuatro años». «Cuando estoy bajo la influencia de las drogas no puedo controlarme y ya no entiendo cuál es la línea divisoria entre lo legal y lo ilegal», expresó.
Sin embargo, Perna entendió que «aunque Genovese había consumido sustancias narcóticas, siempre estuvo lúcido, disponiendo del cuerpo de la víctima como mejor le parecía, dándole una nueva sustancia estupefaciente cada vez que se despertaba». «Por lo tanto, parece improbable argumentar que no tenía percepción de la realidad o que, en su imaginación, había pasado una hermosa velada con su amada», concluyó el magistrado.
La investigación de lo sucedido continuará con la citación de testigos, entre los que se encuentra un custodio del empresario, que fue señalado por la víctima y por otros invitados como la persona que controlaba el ingreso a la sala principal. Incluso, trascendió que el bailarín Roberto Bolle, figura del ballet de La Scala de Milán, llamó a la policía la noche de la fiesta por los ruidos molestos que surgían del apartamento.
