Arrestos fallidos y una canción que enfurece: la manifestación popular que desafió y puso a prueba al régimen cubano

Los más optimistas piensan que ya no hay vuelta atrás. La gente está cansada en Cuba. Tras la pandemia, que afectó económicamente al mundo entero y dejó a la isla comunista sin su principal ingreso -el turismo-, se vive la peor crisis desde el período especial cubano, a comienzos de los 90 cuando cayó la Unión Soviética, que dejó a los cubanos una inflación del 500 por ciento.

Y la falta de alimentos y recursos, mezclada con la falta de libertades ha generado un cóctel explosivo que se ve en las calles de La Habana, sobre todo en barrios como San Isidro, epicentro de las protestas de artistas.

Según el Observatorio Cubano de Derechos Humanos, con base en Madrid, solo en marzo de 2021 se contabilizaron al menos 478 acciones represivas en Cuba, de las cuales 114 resultaron en detenciones arbitrarias. El régimen no está dando el brazo a torcer, y arremete contra aquellos que se atreven a alzar su voz. Los artistas detrás del éxito de Patria y Vida son víctimas de una campaña de desprestigio en los medios propagandísticos oficiales, en los que se los califica de delincuentes financiados por la CIA.

Pero van más allá, y el pasado domingo, las fuerzas del régimen intentaron arrestar (y llegó a esposar) a Osorbo y a El Funky, artistas del movimiento San Isidro que colaboraron con Gente de Zona y Descemer Bueno en Patria y Vida. Pero para sorpresa de muchos, los vecinos salieron a las calles a respaldar a los artistas, obligando a las fuerzas a replegarse mientras entonaban Patria y Vida.

“Fue una importante protesta cívica de cientos de personas en la que se ve un deterioro del régimen y el deseo de una nueva generación de cubanos de lograr un cambio”, dijo a Infobae el doctor Orlando Gutiérrez Boronat, presidente de la Asamblea de la Resistencia, un grupo de organizaciones en el exilio.

Desde su cuenta en redes sociales, Alexander Delgado de Gente de Zona, salió a respaldar a sus colegas y apuntó contra aquellos artistas dentro de la isla que aún le hacen el juego al régimen. “Nosotros reclamamos los derechos de todos los cubanos y el apoyo al Movimiento San Isidro. No dejando engañarnos con todas las mentiras que están diciendo en el noticiero, sobre el financiamiento de la CIA, que es mentira. No sé como todavía existen artistas dentro de la isla, sabiendo lo que pasa ahí, capaces de hablar (…) Lo más malo que pasa aquí son ustedes apoyando la mentira esa. Aquí nadie está incitando a la violencia, simplemente aquí lo que se quiere es un cambio para todos los cubanos”.

A 90 millas de Cuba, en la Florida, el exilio apoya al movimiento urbano contra el régimen y algunos hasta piensan que el cambio en parte de la población civil de Cuba, puede acelerar los procesos en la Casa Blanca. La administración Biden ha sido clara en cuanto a que cambiar el status quo con Cuba no está en sus prioridades, pero también han dicho que están evaluando reestablecer las sanciones a la isla y designar nuevamente a Cuba como país promotor del terrorismo, medidas que no todos apoyan.

“Los canallas del régimen castrista continúan con sus mismas tácticas de acosar, reprimir y socavar al pueblo de Cuba. Y todos los días vemos que son más y más los cubanos que denuncian los atropellos de la dictadura. Los integrantes del movimiento San Isidro han demostrado un compromiso y una valentía increíble, y se han ganado el respeto y la solidaridad del mundo entero”, aseguró a Infobae la congresista federal republicana por el estado de Florida, María Elvira Salazar, cubano-americana y vocal opositora al régimen en la capital estadounidense.

“La represión del régimen comunista le muestra a la administración Biden lo inútil de las de las sanciones. Estamos ante una nueva muestra de que el régimen están llegando a su fin y el pueblo de Cuba lo puede derrocar”, agregó Gutiérrez Boronat.