La reciente aparición de fenómenos anómalos no identificados (también conocidos como objetos voladores no identificados) sobre el espacio aéreo de Estados Unidos1 ha suscitado un renovado interés por los extraterrestres. * La curiosidad ante la posible vida más allá de nuestro planeta no es nada nuevo, y las películas y programas de televisión nunca han evitado la conversación. «Alienígenas Ancestrales» (Ancient Aliens) (History, 2009-) aviva el fuego de la especulación. La serie, que va por su decimonovena temporada, sigue cautivando a los espectadores, hasta el punto de que ha dado lugar a eventos en directo protagonizados por sus astronautas teóricos ancestrales.2 La serie presenta episodios que invitan a los espectadores a plantearse interrogantes sobre la Biblia, la humanidad y la posible presencia de extraterrestres en el relato bíblico. Por ejemplo, ¿se propusieron Satanás y otros ángeles caídos hacer el bien a la humanidad revelando el conocimiento divino? ¿Qué le ocurrió realmente a Moisés en el monte Sinaí? ¿Era el Arca del Pacto una caja de herramientas llena de poder extraterrestre?
Quizá lo más sorprendente de la serie no sea su longevidad, sino su apariencia de credibilidad. Los expertos que aparecen hacen declaraciones que suenan como si estuvieran basadas en la verdad. Como cristianos y proveedores de la verdad, debemos estar en guardia contra la falsedad. Estamos llamados a estar preparados para defender la esperanza que llevamos dentro (1Pedro 3:15). Como cristianos, debemos plantearnos cuestiones fundamentales, sobre todo las que afectan a la eternidad. Este artículo ayudará al lector a aclarar algunos de los episodios más populares de «Alienígenas Ancestrales» en los que es nombrada la Biblia. También abordará las preguntas que muchos se hacen: ¿es correcto que los cristianos crean en extraterrestres? y, si existen extraterrestres inteligentes, ¿qué significa esto para el cristianismo?
Extraterrestres en el Jardín del Edén
«Alienígenas Ancestrales» presenta la narración del Jardín del Edén desde una perspectiva diferente a la que te pueden haber enseñado en la escuela dominical. Dicen que una «antigua leyenda» describe a la serpiente como «una forma humanoide que se mantenía erguida y tenía brazos y piernas».3 En otras palabras, la serpiente no era realmente una serpiente. Uno de los astronautas teóricos ancestrales más conocidos, David Childress, describe la transformación de Adán y Eva después de comer la fruta: «De repente, se convierten por completo en lo que llamaríamos gente moderna: … En cierto sentido, se trata de un salto evolutivo de humanos primitivos a humanos más modernos, más conscientes de sí mismos y de lo que les rodea».4
A continuación, la serie establece un paralelismo entre la serpiente del Jardín del Edén y «Enki», un dios de los «Anunnaki», un grupo de deidades descritas en los primeros escritos sumerios. Llegan a la conclusión de que «Enki» era la serpiente del Jardín. Y no solo eso, «Enki» «alteró el ADN humano para despertarnos e iluminarnos».5 En esencia, la Caída fue evolutiva y empujó a la humanidad hacia el progreso.
Satanás: Una conspiración divina
Según las Escrituras, Satanás es un ángel caído (véase Ezequiel 28 e Isaías 14). Es el enemigo de Dios. Busca robar, matar y destruir (Juan 10:10). Sin embargo, «Alienígenas Ancestrales» presenta una imagen muy distinta de Satanás. De hecho, la serie siembra la semilla de que el relato bíblico de la Caída y el papel de Satanás en ella es «fantasioso».6 Como alternativa, plantean la hipótesis de que la Biblia omite una pieza clave de la narración: que «Eva quiere madurar…Dios quiere mantenernos en un estado de inocencia perpetua, infantilidad quizá».7 Satanás tenía la llave del conocimiento divino y tentó con ella a Eva exitosamente. Al parecer, Dios quería mantenernos en la inocencia y la ingenuidad (de ahí su edicto de evitar el Árbol del Conocimiento), pero Satanás le desafió porque quería que los humanos lo supieran todo.
Otra teoría sobre Satanás tiene que ver con los llamados Vigilantes que se encuentran en el Libro pseudoepigráfico de Enoc, parte de los antiguos documentos hallados en Qumrán en 1948. Los Vigilantes, dirigidos por Samyaza (vinculado a Satanás), eran 200 ángeles enviados para vigilar a la humanidad. Se rebelaron y se aparearon con los humanos. 8 «Alienígenas Ancestrales» pinta esto como una liberación para la humanidad. Un astronauta teórico ancestral afirma: «Fue Satán quien nos dio las herramientas de la civilización».9 «Es muy posible», sugiere Erich von Däniken, «que nuestras tradiciones religiosas y quienes eligieron los antiguos textos sagrados hace miles de años hicieran de Lucifer y del diablo una figura maligna. Y tal vez fuera al revés. Él era el bueno».10
Noé y Moisés: ¿Extraterrestres?
«Alienígenas Ancestrales» también tiene teorías sobre el linaje de Noé. Entre los Rollos del Mar Muerto encontrados en Qumrán estaba el Rollo de Lamec, un texto que la serie afirma que pone en duda el linaje de Noé. Von Däniken afirma que el Rollo de Lamec demuestra que Noé fue el resultado de una inseminación artificial por los «guardianes del cielo».11 Al parecer, así lo demuestra el extraño aspecto de Noé al nacer, que incluye la capacidad de iluminar la habitación con sus ojos. 12 El programa sugiere que el diluvio fue un medio para destruir los errores genéticos en el mundo.
En cuanto a Moisés, «Alienígenas Ancestrales» también sugiere algo de otro mundo. Cuando Moisés descendió del monte Sinaí con los Diez Mandamientos, tuvo que llevar un pañuelo en la cara porque «la piel de su rostro resplandecía», un efecto secundario de estar en presencia de Dios (Éxodo 34:29).13 Uno de los expertos de dicha serie postula que Moisés tuvo una interacción física con «un ser extraterrestre en lugar de lo que generalmente clasificaríamos como divino».14 Han eliminado a Dios y lo han sustituido por un extraterrestre. Y la ilustración bíblica de Dios bajando del cielo en realidad no era Dios, sino un objeto volador no identificado. El astronauta teórico ancestral Nick Redfern especula que Moisés fue abducido por un OVNI y retenido en la nave durante cuarenta días. Los Diez Mandamientos, por tanto, eran mensajes de paz de los extraterrestres y no órdenes de nuestro Creador.15
El Arca del Pacto: ¿Una caja de herramientas extraterrestre?
Las Escrituras dicen que el Arca del Pacto contenía los Diez Mandamientos, una vasija de maná y la vara de Aarón. Fue creada con instrucciones específicas dadas por Dios, y con reglas que debían seguirse en cuanto a su transporte y cuidado. Si dichas reglas no eran seguidas, habría consecuencias (por ejemplo, Uza la tocó y murió en 2Samuel 6:6-7, y varios otros murieron porque miraron dentro en 1Samuel 6:19).
El programa tiene algunas ideas sobre el propósito del Arca, y como ya habrás adivinado, las teorías tienen que ver con los extraterrestres. Un teórico de «Alienígenas Ancestrales» explica que el Arca del Pacto era un contenedor de almacenamiento para la «máquina de maná… un dispositivo nuclear».16 Este dispositivo mantenía a los israelitas seguros y alimentados. David Wilcock17 sugiere que la tecnología que albergaba el Arca era «más avanzada quecualquier cosa que tengamos ahora». El programa enfatiza el poder del Arca del Pacto, afirmando que su poder fue el responsable de secar el río Jordán y derrumbar las murallas de Jericó. 18 Los rayos de fuego y otros poderes destructivos descritos en las Escrituras se debían al «poder atómico» alojado en el Arca. 19 De hecho, los sumos sacerdotes tenían que vestir equipo de protección para mantenerse a salvo cuando estaban en presencia del Arca porque era un condensador eléctrico, lo que aparentemente es más plausible que fuera el propiciatorio de Dios.20 Una vez más, los expertos de «Alienígenas Ancestrales» borran a Dios y lo sustituyen por extraterrestres.
Las fuentes y los hechos importan
Una frase repetida en cada episodio es «Los astronautas teóricos ancestrales y estudiosos de la Biblia dicen». ¿Quiénes son estos teóricos y estudiosos? Un ejemplo es el ya mencionado von Däniken (también conocido como el «padrino de la teoría del astronauta antiguo», aunque no sea su descubridor). No tiene educación formal, pero se le considera un «explorador de los misterios del mundo».21 Gran parte de lo que se encuentra en «Alienígenas Ancestrales» se basa en la información encontrada en el libro de von Däniken, «¿Carrozas de los Dioses?» (Chariots of the Gods?) (1968). 22 El libro tiene casi 200 páginas y no contiene ni una sola nota a pie de página. 23 Otro teórico destacado de los antiguos astronautas es el reverendo Barry Downing, autor de «La Biblia y los Platillos Volantes» (The Bible and Flying Saucers) (Amazon, 2019).24 Hace muchos postulados, pero ofrece muy pocas pruebas para apoyar esas alegaciones. A pesar de su formación cristiana, sustituye fácilmente a Dios por alienígenas en la narrativa bíblica. Otros astronautas teóricos ancestrales que aparecen incluyen a Wilcock, Corey Goode,25 Giorgio Tsoukalos y Scott Roberts, la mayoría de los cuales no tienen formación académica en campos relevantes como la arqueología (o cualquier ciencia) o la historia.
Las fuentes son importantes. De dónde obtenemos las pruebas y la verdad es importante. Como cristianos, creemos que la Biblia es la Palabra de Dios. Tenemos buenas pruebas para creer que la vida, muerte y resurrección de Jesús ocurrieron realmente.26 La teoría del astronauta ancestral rara vez se cuestiona, si es que se hace, en «Alienígenas Ancestrales». Lo que dicen los teóricos se toma a menudo como un hecho establecido. Las cuestiones especulativas se presentan como conclusiones.
Cristianismo y Extraterrestres
Al día de hoy, los seres humanos no han descubierto vida (racional o no racional) en ningún otro lugar del universo. Hay buenas razones para creer que no hemos sido visitados por extraterrestres. Pero con cada afirmación de creencia en OVNIS por parte de famosos y políticos,27 aumentan las especulaciones de que no estamos solos en el universo. De hecho, según Pew, más del cincuenta por ciento de los protestantes y el sesenta y siete por ciento de los católicos romanos creen en vida inteligente en otros planetas.28 ¿Qué significaría para la fe cristiana el descubrimiento de alienígenas inteligentes?
«En el principio creó Dios los cielos y la tierra» (Génesis 1:1). Los cielos no solo incluyen el cielo que ves sobre ti. Es el universo y todo lo que hay en él. A pesar de las afirmaciones que escuchamos en «Alienígenas Ancestrales», no encontramos pruebas en las Escrituras que apoyen la existencia de extraterrestres inteligentes, y ciertamente no leemos acerca de tales seres creados en la narrativa de la creación. Pero ¿y si un día encontráramos vida racional e inteligente de otro mundo? Pues bien, ellos también necesitarían un Salvador. La filósofa Marie I. George afirma que «serían creados en gracia y, por tanto, estarían ordenados a un fin sobrenatural».29 Esto se hace eco de los pensamientos de Billy Graham: «Creo firmemente que hay seres inteligentes como nosotros muy lejos en el espacio que adoran a Dios… Al igual que nosotros, son creación de Dios».30 Dios no es reemplazado por su creación. La realidad es que simplemente no lo sabemos, pero sería bueno contar con un plan en caso de que se descubriera vida extraterrestre inteligente.
Todos deberíamos cuestionarnos sobre las cosas en las que creemos. Como apologista, animo a que nos hagamos preguntas. Así es como los padres deberían ser con sus hijos. Así deben ser los cristianos con los escépticos y los creyentes. Jesús alentó las preguntas y los pensamientos profundos. Las preguntas no son malas, pero las buenas respuestas deben estar respaldadas por evidencias. Aquí es donde «Alienígenas Ancestrales» falla. Presentan hipótesis como verdad, y lo que es peor, a menudo presentan pruebas que no están respaldadas por estudiosos o por la realidad.
«Alienígenas Ancestrales» emitirá su episodio 227 esta temporada. Aunque se trasmite a través del «History Channel», no es histórico, y no deberías comprar la información que vende. Al insertar extraterrestres en la narrativa bíblica, el programa elimina a Dios y sus poderes sobrenaturales. Ellos insinúan que Dios no era lo suficientemente poderoso, por lo que necesitaba la ayuda de los extraterrestres. Como cristianos, deberíamos proclamar con valentía: «Grande es el Señor nuestro, y de mucho poder; y su entendimiento es infinito» (Salmo 147:5). Deberíamos, como hizo Jeremías, alabar a nuestro todopoderoso Creador: «¡Oh Señor Jehová! he aquí que tú hiciste el cielo y la tierra con tu gran poder, y con tu brazo extendido, ni hay nada que sea difícil para ti» (Jeremías 32:17). Dios no necesita ayuda fuera de este mundo para realizar milagros que parecen imposibles. Él es el Alfa y la Omega, el principio y el fin. El universo es suyo, y todo en él está bajo su poder y control. Incluso si resulta que existen extraterrestres racionales. Nada es más grande que Él: «Excelso sobre todas las naciones es Jehová, sobre los cielos su gloria. ¿Quién como Jehová nuestro Dios, que se sienta en las alturas, que se humilla a mirar en el cielo y en la tierra?» (Salmo 113:4-6).
Lindsey Medenwaldt es directora de Operaciones Ministeriales en Mama Bear Apologetics y trabaja como editora consultora para Christian Research Journal. Tiene un Máster en Apologética y Ética por el Seminario de Denver, un JD (Juris Doctorate) por la Facultad de Derecho de St. Mary y un Máster en Administración Pública por la Midwestern State University.
*En este artículo, extraterrestre se refiere a la vida biológica inteligente alienígena originada fuera de la Tierra (lo que a menudo se denomina «hombrecillos verdes»), no a seres espirituales no humanos descritos en las Escrituras (ángeles, Satanás, demonios, etc.).