Para Keyla Zabala, residente de los Frailes II, en Santo Domingo Este, era habitual que su hermano Frank Zabala tomara mucho alcohol, por lo cual el hecho de que se fuese a acostar temprano el sábado pasado llamó su atención y la de sus vecinos.
Nunca pensó que su hermano, así como otras cinco personas, estuviera a punto de morir por ingerir alcohol adulterado. El sábado él (su hermano) estaba tomando y se acostó temprano, cosa que no suele hacer, pero al parecer ya estaba mal y al otro día.
El vecino como vio que eran las 10:00 de la mañana y no lo había visto se preocupó, porque ya sabíamos de un caso de fallecimiento por alcohol adulterado”, explicó a este Diario Zabala.
Narró como su hermano, de 48 años, con pocas fuerzas logró abrir la puerta para luego vomitar varias veces.
“Lo sentamos en una silla y llamamos al 911 y de ahí yo me fui con él para el hospital. Lo llevaron al Moscoso Puello, a las cuatro horas se puso malo, estaba desesperado, se quitó la ropa, se iba a tirar de la camilla y tuvieron que amarrarlo”, contó.
Luego de este episodio, su hermano falleció. Zabala indicó que en total 10 personas se intoxicaron el fin de semana pasado debido al consumo de alcohol adulterado.
“Que yo conozcan van seis víctimas, hay otro muchacho que esta malo, pero él no quiere ir al médico, le están dando remedio casero”, dijo.
Zabala explicó que todos los intoxicados compraban el ron en un colmado de una esquina del referido sector y que estaban acostumbrados a comprarlo y nunca les había pasado nada.