Un exagente del sheriff del condado de McNairy, en Tennessee, fue acusado de disparar y matar a siete perros cuando sus dueños estaban cenando, luego de una intervención que se produjo tras una llamada que alertaba el estado de los animales, en un suceso ocurrido el pasado 4 de noviembre en Bethel Springs.
Según informes de Atlanta News First, el agente identificado como Connor Brackin llegó a la residencia después de recibir una denuncia sobre posibles condiciones inadecuadas para los perros. Sin embargo, al llegar al lugar, supuestamente abrió fuego sin justificación aparente, informó el Atlanta News First.
Los propietarios de los animales, Kevin Dismuke y su esposa, regresaron a casa para encontrar tres perros muertos dentro y cuatro más afuera. “No sé de dónde sacaron la idea de que estaban desnutridos o abandonados”, expresó Dismuke a Fox 13 Memphis.
La pareja ha manifestado su frustración y dolor ante lo que consideran un acto injustificable. Dismuke comentó que no hay razón válida para pensar que sus mascotas estaban desnutridas o abandonadas.
“No tengo una respuesta para por qué se detuvo y actuó de esa manera. Nunca tendré una respuesta para eso”, lamentó Dismuke.
Tras el incidente, se emitió una orden de arresto contra Brackin, quien se entregó posteriormente y fue liberado bajo fianza.
En total, enfrenta siete cargos por crueldad agravada hacia los animales y ocho cargos por poner en peligro imprudentemente a otros. La oficina del sheriff informó que Brackin había estado en funciones menos de un mes antes del trágico evento.