La cifra de israelíes cautivos en la Franja de Gaza por Hamás en medio del ataque sin precedentes contra Israel ha aumentado a 210, reveló el vocero del Ejército del Estado Judío, Daniel Hagari, este sábado.
“Se ha notificado a las familias de 210 rehenes que sus seres queridos se encuentran actualmente detenidos en la Franja de Gaza”, indicó el funcionario.
El número pasó de 203 a 210, pero el portavoz alertó que esa cantidad de personas secuestradas no es definitiva, pues el Ejército está detrás de las averiguaciones del paradero de al menos 100 desaparecidos.
Entre los extranjeros que fueron reportados como desaparecidos hay doce hispanos y dos españoles, de acuerdo con la información oficial.
El total de rehenes ya no incluye a las israelíes-estadounidenses, Judith Ranan y su hija adolescente Natalie, que Hamás liberó en la noche del viernes por “razones humanitarias”.
Hasta el momento, ellas fueron las únicas personas confirmadas como liberadas por parte de las autoridades de Israel.
El conflicto armado entre Israel y Hamás que inició el 7 de octubre tras un ataque sorpresa por aire, mar y tierra del grupo palestino incluyó lanzamientos de cohetes y la infiltración de más de 1,000 milicianos, que torturaron y masacraron a cientos de habitantes de pueblos israelíes cercanos a Gaza, dejando cerca de 1,400 muertos y 5,000 heridos.
El Ejército de Israel contraatacó desde el primer día de guerra, dejando a más de 1,200 milicianos sin vida en su territorio, además de realizar bombardeos sin parar en la Franja, que han dejado 4,385 muertos y 13,000 heridos (70% son mujeres, niños y ancianos), mientras la crisis humanitaria por la escasez de agua, medicamentos, comida, electricidad y combustible flagela a los palestinos.
“El combustible no entrará en Gaza”, afirmó Hagari, tras días de total bloqueo en el enclave por parte de Israel para abastecer los servicios básicos.
No obstante, por algunas horas, se abrió el cruce de Rafah, con Egipto, entrando 20 camiones de ayuda humanitaria como comida enlatada, medicinas y mantas, pero no agua potable, que ha escaseado desde hace varios días en Gaza.
La ayuda solo fue distribuida a hospitales del sur del enclave, no en la mitad norte.