El Buró Federal de Investigaciones (FBI) ha lanzado una campaña para localizar a mexicanas que hayan sido abusadas sexualmente sin darse cuenta y luego fotografiadas desnudas por un hombre que trabajó en la Embajada de Estados Unidos en México entre agosto de 2018 y mayo pasado.
Brian Jeffrey Raymond, de 44 años, se encuentra bajo custodia federal desde el 9 de octubre, luego que dos mujeres lo denunciaron. Fue arrestado en La Mesa, California, por un cargo de agresión sexual que los fiscales presentaron en una corte federal en el Distrito de Columbia. Si es declarado culpable de ese delito enfrentaría una condena de hasta 20 años de prisión.
Pero además, las autoridades encontraron en los aparatos electrónicos que le confiscaron a Raymond varias imágenes de mujeres desnudas que estaban acostadas en una cama al parecer inconscientes. Quienes alegan que fueron abusadas por este hombre cuentan que lo conocieron en un portal de citas y que al salir con él ingirieron una bebida que les dio, sintieron un profundo mareo, se desmayaron y despertaron vestidas en una cama sin saber qué había pasado.
Brian Jeffrey Raymond es acusado de abuso sexual en una corte del Distrito de Columbia. Crédito: FBI
“La investigación también ha desvelado fotografías y videos de mujeres adultas adicionales en los dispositivos y cuentas electrónicas de Raymond”, indica el FBI en el sitio que habilitó para encontrar a otras supuestas víctimas de este exempleado del gobierno estadounidense.PUBLICIDAD
“El FBI ha creado un sistema electrónico central para recolectar información de otras víctimas potenciales para investigar este caso más a fondo”, explica la dependencia.
Raymond vivió en México desde el verano de 2018, siendo parte del cuerpo diplomático de EEUU en ese país. Viajaba por muchos países, incluyendo Perú. Habla español y mandarín.
Incidentes en México y Virginia
Una de sus presuntas víctimas asegura que fue violada en un apartamento de la Ciudad de México que arrendaba el gobierno estadounidense.
La mujer les contó a los investigadores que durante una cita amorosa que tuvo con Raymond en mayo fueron a la vivienda, donde comieron bocadillos y bebieron “una copa de vino” que él le llevó. Relató que se desmayó y no supo qué le ocurrió. Hasta que le practicaron un análisis médico supo que tenía lesiones propias de una violación.
La Policía de la Ciudad de México llegó a ese apartamento por los reportes de una “mujer desnuda que gritaba desesperadamente pidiendo ayuda”.
En junio, agentes federales estadounidenses interrogaron al acusado sobre el incidente y le confiscaron dos celulares y otros dispositivos electrónicos.
En esos aparatos y en su cuenta de iCloud encontraron varias fotos y videos de mujeres dormidas y sin ropa, algunas de las cuales datan de 2011. Allí había imágenes de quien supuestamente fue agredida sexualmente en la Ciudad de México, de una mujer de Virginia y de otras 22 posibles víctimas.
Cuando los investigadores conversaron con la mujer de Virginia, identificada en este caso como ‘Víctima 4’, ella relató que lo conoció a través de un sitio de citas y que se vieron dos veces.
En el último encuentro, ocurrido en mayo de 2017, llegaron hasta el apartamento de ella. Mientras le daba sorbos a la bebida que le dio, ella comenzó a sentirse “mareada” y se desmayó en el balcón. Al despertar estaba acostada en su cama y vestida. Parecía que nada extraño había sucedido, pero ella sospechó porque jamás había perdido el conocimiento de esa manera.
La mujer creía que el contacto físico en las citas no había pasado de un abrazo, hasta que le mostraron dos videos y ocho fotos en las que aparecía desnuda y acostada en su recámara. Ella se identificó en esas imágenes por su tatuaje, la decoración de su apartamento y las sábanas de su cama.
Al revisar los celulares de Raymond, también encontraron que había hecho estas búsquedas en la Internet en febrero de 2020: “niña negra desmayada” y “sueño profundo”. Años atrás buscó información sobre un potente sedante y observó múltiples videos en YouTube de mujeres desmayadas.
Al describir el modus operandi del acusado, los fiscales lo catalogaron como un “depredador sexual experimentado”, así como “un peligro para la comunidad y un riesgo de que se fugue”.
“A juzgar por todas las apariencias, él ha llevado una vida ejemplar. El hecho de que muchas víctimas no supieran sobre su comportamiento hasta que se les mostraron los videos y fotos tomadas mientras estaban inconscientes es evidencia de su habilidad única para retratar un rostro público muy diferente”, señalan documentos judiciales revisados por Univision Noticias.
Este caso sigue bajo investigación. Un juez federal ya le negó al acusado salir libre bajo fianza.
