El director del hospital Shifa, en la ciudad de Gaza, Mohammad Abu Salmia, afirmó que, pese al anuncio del Ejército israelí sobre la evacuación total de la capital del enclave palestino, el equipo médico no tiene intención de abandonar la ciudad ni evacuar a los pacientes.
“Nos quedaremos con los pacientes”, declaró en mensajes el responsable del mayor hospital de la capital gazatí, que cuenta con 402 camas, tras la orden de evacuación de toda la urbe, donde viven alrededor de un millón de personas.
Según Abu Salmia, tanto su hospital como el resto de los centros sanitarios de la ciudad de Gaza están completamente saturados, pero la situación en el sur de la Franja es igualmente crítica: “no hay sitio para recibir a ningún paciente”, denunció.
El director médico alertó que la situación es “extremadamente peligrosa” en los hospitales de Gaza tras la orden de evacuación, con una ocupación del 300 %, lo que impide trasladar a los enfermos.
“Todos los hospitales en el sur de Gaza, públicos y de campaña, están ocupados por pacientes, por heridos, y no hay sitio para llevar a ningún enfermo en el sur. La situación es muy, muy, muy difícil”, remarcó.
Las unidades de cuidados intensivos están colapsadas. Abu Salmia detalló que hay más de 50 pacientes con ventilación mecánica y oxígeno, 80 bebés en incubadoras y 350 personas en diálisis.
Solo en el Shifa, indicó, permanecen 15 pacientes en cuidados intensivos, 21 neonatos en incubadoras y la totalidad de los pacientes de diálisis, el traslado de todos ellos sería “extremadamente difícil”.
“Nos quedaremos con los pacientes, con los heridos, en el hospital, pero nuestras experiencias con la ocupación (israelí) han sido terribles. Pedimos una protección internacional urgente para los hospitales, el personal médico y un corredor seguro para trasladar a los heridos”, reclamó.
Actualmente, la población gazatí de la capital sufre “hambruna, enfermedad y heridas”, además de estar “mental y físicamente exhausta”.
El Ministerio de Sanidad de Gaza hizo este martes un llamado urgente a la comunidad internacional para garantizar la protección inmediata de hospitales y personal médico, tras la evacuación completa de la ciudad ordenada por Israel.
El Ejército israelí declaró toda la ciudad de Gaza como “zona de combate peligrosa” y exhortó a la población a desplazarse al sur, hacia la denominada “zona humanitaria” cercana a Jan Yunis, que ya se encuentra saturada de desplazados.
