El número de inmigrantes recluidos en los centros de detención del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas continúa en aumento, alcanzando un total de 39,175 extranjeros bajo custodia federal en la última semana de febrero. Esto, según un informe publicado el jueves por la Universidad de Syracuse en Nueva York y reportado por la agencia de noticias EFE.
Este dato marca la cifra más alta registrada durante la Administración del presidente Joe Biden, quien en diciembre del año pasado reportó 36,755 personas bajo custodia migratoria.
De acuerdo con el informe de la Transactional Records Access Clearinghouse, un grupo de investigadores de la Universidad de Syracuse, los centros de detención de ICE en Texas presentan la población reclusa diaria promedio más alta en lo que va del año fiscal 2024, que comenzó el 1 de octubre pasado.
Específicamente, el Centro Residencial Familiar en Dilley es el que alberga a la mayor cantidad de inmigrantes, con un promedio diario de 1,845 personas en lo que va del año.
De los 20,535 migrantes enviados a las cárceles migratorias, 6,510 fueron arrestados por ICE y 14,025 por los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.
Mientras aumenta el número de detenidos en los centros de ICE, se observa una disminución de inmigrantes bajo el programa de Detención Alternativa, que supervisa a los extranjeros que están disputando sus casos de deportación en corte.
Actualmente, 185,000 migrantes están bajo Detención Alternativa, lo que representa un 37% menos en comparación con febrero de 2023, cuando había 293.000 personas monitoreadas bajo este programa.
Desde el 12 de mayo de 2023, el gobierno de Joe Biden ha expulsado o devuelto a más de 583,000 personas, la mayoría de las cuales cruzaron la frontera suroeste, incluyendo a más de 92,000 familias, según datos revelados por ICE este jueves.
Joe Biden y Donald Trump en la frontera
Tanto el presidente estadounidense Joe Biden como su predecesor y posible contrincante en las elecciones de noviembre, Donald Trump, visitaron el jueves la frontera sur de Estados Unidos, centrando la atención en la migración como punto central de sus respectivas campañas, publicó EFE.
Desde la ciudad de Brownsville, colindante con Matamoros (México), Biden habló de la “necesidad” de aprobar un polémico proyecto de ley bipartidista que incluía restricciones al derecho al asilo a cambio del apoyo republicano para seguir financiando a Ucrania e Israel. Sin embargo, el acuerdo ha naufragado en el Senado ante la oposición liderada por Trump.
En respuesta, el exmandatario, desde Eagle Pass, que limita con Piedras Negras (México), acusó a Biden de mantener una frontera abierta a pesar de las restricciones impuestas a las solicitudes de asilo. Renovó así sus críticas habituales sobre los inmigrantes, los calificó de “terroristas” y lanzó duras críticas a las políticas migratorias de la administración demócrata.
Ambos líderes aprovecharon sus respectivas plataformas para arremeter uno contra el otro, con Joe Biden instando a Donald Trump a respaldar el proyecto de ley bipartidista y Trump acusando a Biden de incompetencia y de permitir una supuesta “invasión” migrante.
Las declaraciones de los políticos ocurrieron días antes de una fecha clave en el calendario electoral: el 5 de marzo, conocido como supermartes, cuando una quincena de estados celebran primarias. Ambos son considerados favoritos para obtener la nominación de su partido para las elecciones de noviembre.