
NUEVA YORK. – Rikers Island, el enorme complejo penitenciario de 10 cárceles ubicado en la ciudad de Nueva York, vuelve a estar en el centro de la polémica tras la más reciente muerte de un interno, con lo que ya suman 13 fallecidos en este 2025.
Con más de 7,000 reclusos, la mayoría en espera de juicio o sentencia, la cárcel ha sido denunciada durante años por violencia extrema, negligencia médica, muertes bajo custodia e incluso venta de drogas con complicidad de algunos guardias.
En mayo de 2025, una jueza federal retiró el control de Rikers a la ciudad de Nueva York y designó a un administrador independiente, tras concluir que el Departamento de Corrección había perdido la capacidad de mantener el orden del complejo.
Costos millonarios por preso
De acuerdo con la Comisión Independiente de Rikers, cada interno cuesta a la ciudad alrededor de 400,000 dólares al año, una cifra muy superior a los $133,000 que se gastan en promedio en las cárceles de California, según la Oficina de Análisis Legislativo.
Sin embargo, los altos costos no se reflejan en mejores condiciones para los nipara los detenidos como custodios. “Yo describiría a Rikers como fuera de control. Las pandillas han tomado el control de algunas áreas”, declaró Mark Vularo, exsubdirector adjunto del complejo.
Uno de los factores que, según exfuncionarios, pudo haber incrementado la violencia fue la eliminación del confinamiento en solitario, medida adoptada en los últimos años como parte de las reformas carcelarias, admitió Vularo.
Plan de cierre en riesgo
En 2019, el Consejo de la Ciudad aprobó el cierre definitivo de Rikers Island para agosto de 2027, con la idea de reemplazarlo con cárceles más pequeñas en Manhattan, Brooklyn, Queens y el Bronx. Sin embargo, el avance ha sido lento y expertos advierten que difícilmente se cumplirá el plazo.
El complejo, 20 veces más grande que la isla de Alcatraz en California, ha sido descrito como una “bomba de tiempo” para la justicia neoyorquina. Y mientras su clausura se retrasa, continúa siendo el lugar de detención de figuras mediáticas como el exproductor de Hollywood Harvey Weinstein.