En la comunidad de El Mamey, en Higüey, varios ciudadanos, obstinados ya de los constantes robos en la zona, decidieron tomar justicia por sus propias manos y lograron la captura por sus propios medios, de dos individuos que supuestamente se encontraban delinquiendo en la zona.
Hicieron en ese sentido que los presuntos delincuentes caminaron esposados y sometiéndoles a castigos físicos, como golpes con un machete.
El incidente es un recordatorio de que el camino fácil puede llevar a la cárcel y que, a pesar de los errores cometidos, los jóvenes aún tienen la oportunidad de cambiar su rumbo y optar por un futuro diferente.