En San Francisco de Macorís, un joven de 19 años fue encontrado dormido en una casa ajena. Según su versión, ingresó al lugar sin forzar la puerta, buscando un lugar donde descansar después de cinco días de insomnio.
El propietario de la vivienda, al llegar a su casa, encontró al joven acostado en una de las habitaciones. Tras ser notificado, el dueño alertó a las autoridades, quienes procedieron a detener al joven en el lugar. El acusado aseguró que no tenía intenciones de robar.
Durante su estadía en la propiedad, el joven admitió haber consumido dos panes y un salami que encontró en la nevera. También explicó que no conocía personalmente a los propietarios, aunque identificó por su nombre al hijo del dueño.
Las autoridades locales lo retuvieron por unas horas antes de otorgarle la libertad. El joven, que se dedica a la recolección de materiales reciclables, agradeció a los propietarios por no tomar acciones legales más severas. En sus declaraciones, indicó que el cansancio extremo y el hambre lo llevaron a entrar al lugar.
Actualmente, en libertad, el joven aseguró que no volverá a acercarse a la vivienda. La comunidad local permanece atenta ante situaciones similares, aunque no se han reportado incidentes adicionales. Las autoridades instan a reforzar la seguridad en las viviendas para prevenir estos casos.