El río Yaque del Norte, es el más largo del país y el más importante para la región norte. Nace en la cordillera central y desemboca en las aguas del océano Atlántico, en las costas de Monte Cristi. Su cuenca es la más grande de los ríos de la República Dominicana, aportando agua para todo el Cibao central, occidental y la línea noroeste.
Los canales de irrigación que se construyeron utilizando las aguas del Yaque del Norte son indispensables para la agricultura, por igual para las 7 provincias y gran cantidad de municipios de toda la región por la que hace su recorrido, pero a pesar de todos estos vitales aportes, es constantemente agredido por las actividades industriales y humanas hasta su salida al océano.
No hay plantas de tratamiento en las comunidades cercanas al río por lo que todas las aguas negras y residuales son vertidas a este, sucediendo esto también con la basura y desechos sólidos. Sólo hace falta que llueva un poco, para que todos los desechos, en su mayoría FOAM y plásticos, desciendan hacia las zonas bajas cubriendo incluso el ancho de su cauce en algunos puntos, como pasa en Monte Cristi y Santiago. Este cóctel de aguas negras y basura, a parte de las actividades industriales que también vierten aguas residuales, sustancias químicas, agroquímicos entre otros, está impactando todos los ambientes naturales que existen en la extensión del Yaque del Norte.
También se ve amenazada la biodiversidad pues toda esta contaminación está poniendo en riesgo especies, impactando de forma directa en las poblaciones de aves, peces entre otros y por igual el impacto negativo en la flora. Los sedimentos y escombros que arrastra el río debido a la contaminación también llegan a los acueductos, afectando las presas e incluso la generación hidroeléctrica. Con todos estos “golpes” el Yaque del Norte agoniza.
Estamos hablando del insumo más importante para la subsistencia de toda especie, EL AGUA y que estamos poniendo en riesgo inminente por ignorancia e irresponsabilidad colectiva. Absolutamente todas las actividades que están afectando al río Yaque del Norte pueden ser mitigadas y controladas, pero es necesaria la colaboración de todos, principalmente del gobierno.
Reforestando con especies que aporten a la regeneración de la cuenca alta, construir plantas de tratamiento en todas las provincias y municipios que descargan en el río, prohibir el descargo de aguas residuales, de sedimentos por lavado de agregados, fiscalizar/regular a los infractores, trabajar con las comunidades con el tema de la basura, educarlas sobre los desechos y la importancia del río para ellos y sus familias, entre otras acciones; son más que necesarias en este momento.
Hacemos un llamado a las autoridades, al sector empresarial de la región y a todo el país a que juntos trabajemos en el rescate del río Yaque del Norte de manera urgente, antes de que sea muy tarde.
Por Chino Sing
