Estados Unidos retiró todas sus tropas de la base de Kandahar, en el sur de Afganistán, su segunda mayor base militar en el país, anunciaron el viernes las autoridades afganas.
“La base no se nos ha devuelto oficialmente, pero puedo confirmar que la abandonaron el miércoles”, dijo Khoja Yaya Alawi, portavoz del ejército afgano en Kandahar.
“Devolvieron las instalaciones a las fuerzas afganas”, precisó el director del aeropuerto de Kandahar.
El traspaso oficial de la base se realizará después del Aid el Fitr, la fiesta musulmana que marca el final del mes de ayuno y oración de ramadán, indicaron los responsables.
Esta base fue en su momento la segunda más importante para las tropas estadounidenses y extranjeras en el país.
Kandahar es un antiguo bastión talibán y en los últimos meses ha sido escenario de un aumento de la violencia y de los ataques de los insurgentes.
El jueves entró en vigor un alto el fuego de tres días entre talibanes y ejército afgano con motivo del Aid, después de semanas de intensos enfrentamientos en todo el país.
Estados Unidos y la OTAN se comprometieron a retirar a todas sus tropas antes del 11 de septiembre, cuando se cumplirán 20 años de los atentados del 2001. El ejército estadounidense anunció el martes que había avanzado entre un 6% y un 12% en su retirada de Afganistán.