La tragedia se desencadenó en una fatídica decisión: Laura Torres, madre de los hermanos Arianny Rodríguez, de 13 años, Chadal Rodríguez, de 11 años, y Carlos Rodríguez, de 9 años junto al padrastro encontrados muertos la madrugada del miércoles en Georgia, había accedido a dejarlos ir a buscar algo de comer con su expareja mientras ella se quedaba en el hospital acompañando al hijo de ambos.
El cuarto hijo de Torres se encontraba en el hospital recibiendo tratamiento de una lesión no relacionada con el hecho. Tanto la mujer como el hombre son padres de este niño, confirmó la policía, aunque no mantenían una relación actual.
El Consulado de la República Dominicana, ha estado brindando apoyo a la familia.
Los niños y el padrastro nunca regresaron. Aproximadamente la 1 de la madrugada del miércoles cuando un oficial de policía del condado de Gwinnett, patrullando el Lucky Shoals Park, se topó con el espantoso descubrimiento dentro de un Honda sedán, reporta el periódico Atlanta Journal Constitution.
«Es bastante inusual encontrar un vehículo en un sendero peatonal, especialmente a altas horas de la noche… el oficial llamó a los ocupantes del vehículo, pero no obtuvo respuesta», compartió la portavoz de la policía, la sargento Michele Pihera, durante una conferencia de prensa en el lugar.
Fue entonces cuando el oficial se aproximó al automóvil y descubrió los cuerpos de un hombre, un niño y dos niñas, todos aparentemente víctimas de disparos, informó Pihera. El hombre estaba en el asiento del conductor.
“En este momento, los detectives están investigando este caso como un posible asesinato-suicidio, pero la oficina del médico forense tomará una determinación final”, afirmó Pihera.
La policía no ha proporcionado información sobre lo que podría haber desencadenado el tiroteo.
