Un viejo amigo y socio comercial de Donald Trump está considerando comprar la participación de su compañía en dos importantes torres de oficinas en Manhattan y San Francisco, esto en una medida que podría dañar la reputación del expresidente, pero también generarle muchos millones y ayudar a protegerse contra una ola de vencimiento de las deudas comerciales.
Vornado Realty Trust, dirigido por Steven Roth, un amigo y partidario del expresidente, ha tenido discusiones internas sobre la compra o el fin de la participación minoritaria de la Organización Trump en dos edificios: una torre de oficinas en Midtown Manhattan y otra en el distrito financiero de San Francisco, informó el martes el Wall Street Journal.
Vornado no respondió a una solicitud de comentarios de The Independent.
Según se informó, aún no ha hecho ninguna oferta formal y ha considerado retener ingresos a Trump para forzar una posible confrontación legal sobre el proyecto conjunto.
«Vornado ha sido un socio excelente hasta ahora y esperamos que continúe», dijo Trump al Journal, e insistió en que la Organización Trump tiene una deuda baja en comparación con el valor de sus activos.
Las rumoreadas discusiones son el último golpe para los negocios de Trump, luego de que varios socios anteriores se distanciaran o rompieran relaciones por completo después de los disturbios en el Capitolio de Estados Unidos.
Vornado, un importante propietario de bienes raíces para oficinas, intentó vender las dos torres el año pasado por un precio combinado de 5 mil millones de dólares, pero al parecer no pudo encontrar un comprador dispuesto a pagar ese precio, ya que los inversionistas de alto valor no querían hacerse cargo de la propiedad en la que participó la Organización Trump, el holding de Trump. El fideicomiso de bienes raíces tampoco pudo refinanciar los edificios después de los disturbios del Capitolio.
Las torres son una parte importante del negocio de Trump, cada una de las cuales le otorga más de 20 millones de dólares en flujo de efectivo al año, más que sus desarrollos emblemáticos como Trump Tower y el Trump International Hotel en Washington DC.
Aún así, una venta tendría su lado positivo, lo que le daría al expresidente una ganancia financiera inesperada mientras enfrenta la deuda de más de 400 millones de dólares que tiene pendiente en los próximos años, gran parte de la cual está garantizada personalmente.
Si Vornado sigue adelante con la ruptura de la asociación de una forma u otra, sería el último exaliado de alto perfil de Trump en dejarlo. Después de los ataques al Capitolio, Deutsche Bank AG, uno de los principales prestamistas del expresidente, supuestamente comenzó a considerar distanciarse de él y es poco probable que le preste más dinero. Otros bancos, como el Signature Bank de Nueva York y el Professional Bank de Florida, dijeron que cerrarían sus cuentas de Trump, mientras que la PGA se retractó de su acuerdo para celebrar el campeonato de golf de la PGA 2022 en uno de los campos de Trump en Nueva Jersey.