SANTO DOMINGO. – La Sociedad Dominicana de Oncología Médica (SODOM) denunció que en el presente año 2025 ha brillado “por su ausencia” la entrega de medicamentos de alto costo y ha habido una “pésima gestión de los mismos, con inventarios enteros vencidos que no llegaron a manos de los pacientes”.
SODOM emite estos criterios en un documento de prensa remitido a ALMOMENTO.NET en el que afirma que “la corrupción en ARS Senasa y la crisis en el Instituto Regional Oncológico del Cibao han dejado en el camino muchos pacientes fallecidos, en peor estado de salud y sin esperanza por falta de medicamentos y desvío de recetas para favorecer determinadas empresas”.
“El tiempo nos ha dado la razón”, resalta la entidad que agrupa a los oncólogos clínicos del país para afirmar a seguidas que muchos pacientes “esperaron hasta perder la vida en esta batalla interminable por su salud y sus derechos”.
DESVÍO DE PRESCRIPCIONES MÉDICAS
Alega que ha sido frecuente el desvío de las prescripciones médicas hacia empresas mientras las autoridades sólo se han limitado a desmentir las denuncias sin asumir la responsabilidad de auditar el programa destinado a Enfermedades Crónicas No Transmisibles, como cáncer, que maneja fondos millonarios del erario público.
“Se nos va el 2025 y con él se lleva tantas vidas valiosas con ilusiones, que gracias a nuestro sistema corrupto de salud no pudieron ejercer su derecho de acceso a un tratamiento digno y de calidad”, indica.
Sobre el particular agrega: “La lucha no fue fácil, todo lo denunciado fue desmentido; pero al final, el tiempo nos ha dado la razón y ha explicado las causas del cambio de las famosas recetas que denunciamos incansablemente”.
Alega que los que hoy están en el banquillo de los acusados y en el foco público “se dieron a la tarea de dirigir las indicaciones médicas a las farmacéuticas y centros que sí pagaban las cuantiosas sumas exigidas para poder ser parte de los suplidores de la ARS del Estado”.
“Pero lo más penoso fue que las autoridades llamadas a investigar estas denuncias dejaron de hacer su trabajo de desmentir lo que se denunciaba con evidencias contundentes, mientras estas prácticas seguían ocurriendo y afectando la salud del dominicano y el bolsillo y la salud de los pacientes”, apunta.