MOSCÚ.- El Ministerio de Agricultura de Rusia anunció este viernes el envío gratuito de 50.000 toneladas de granos a Somalia y Burkina Faso, suministro prometido por el presidente, Vladímir Putin, durante la cumbre Rusia-África de julio pasado.
«Los primeros dos barcos, con 25.000 toneladas cada uno, ya partieron de puertos rusos en dirección a Somalia y Burkina Faso», dijo Dmitri Pátrushev, ministro de Agricultura, durante el foro-exposición «Rusia».
Pátrushev añadió: «Esperamos su llegada a sus lugares de destino entre finales de noviembre y principios de diciembre».
«En total, se enviarán a África de manera gratuita hasta 200.000 toneladas de trigo ruso», resaltó.
En cuanto al resto de países con los que se comprometió Putin -Zimbabue, Mali, la República Centroafricana (RCA) y Eritrea-, el ministro garantizó que los barcos iniciarán su singladura o viaje antes de finales de este año.
Putin aseguró en la cumbre de julio en San Petersburgo que Moscú no sólo suministraría gratuitamente el cereal, sino que asumiría también los costes de transporte.
Recientemente, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, precisó que esos seis países «se encuentran en la lista del Programa Mundial de Alimentos» y que la «actividad humanitaria» rusa continuará el próximo año.
Rusia tomó esa decisión justo después de suspender el 17 de julio su participación en el Acuerdo de Grano del Mar Negro, lo que de facto anuló la vigencia del corredor humanitario por el que los barcos exportaban el grano ucraniano al mundo.
Desde entonces, Rusia ha mostrado interés en incrementar los suministros a sus clientes tradicionales en el norte de África y Oriente Medio.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, admitió que Ankara y Moscú negocian con Catar el envío de un millón de toneladas de grano ruso para su molienda en Turquía y su posterior suministro a África
Mientras, con la asistencia de los países occidentales, desde julio Ucrania ha logrado exportar más de un millón de toneladas de grano a través del corredor creado a lo largo de las costas de países como Rumanía, a lo que hay que sumar los envíos a través del río Danubio.