
Un equipo de artistas y científicos australianos decidió inmortalizar al compositor estadounidense y pionero de la música experimental Alvin Lucier, fallecido en 2021, utilizando células madre para crear una instalación sonora, informa The Guardian.
Como resultado, hoy es posible escuchar una partitura póstuma en tiempo real en la Galería de Arte de Australia Occidental. La instalación, titulada ‘Revivificación’, se exhibe desde el 5 de abril.
En 1965, Alvin Lucier se convirtió en el primer artista en utilizar ondas cerebrales para crear sonidos en vivo. Y en 2020, a sus 89 años, mientras padecía la enfermedad de Parkinson, decidió donar su sangre para el proyecto ‘Revivificación’.
Los científicos utilizaron la sangre del compositor para crear células madre. Basándose en estas consiguieron crear una imitación del cerebro humano.
Discutieron los detalles del futuro proyecto con el músico hasta el día de su muerte. «Éramos como estudiantes de arte que aprendían de un profesor. Tenía la habilidad de eliminar todo lo superfluo y llegar al fondo de lo que imaginaba», reveló Nathan Thompson, uno de los autores.
La instalación escultórica y sonora consta de 20 grandes placas de latón que se doblan en las paredes y se asemejan a antenas parabólicas. Detrás de cada placa hay un transductor, similar en funcionalidad a un altavoz, y un martillo, que responden a las señales neuronales del «minicerebro«, lo que hace que el espacio se llene con una banda sonora.
Ahora los científicos se preguntan por algunas cuestiones clave:»¿Podría haber un filamento de memoria que persista a través de esta transformación biológica? ¿Puede la esencia creativa de Lucier persistir más allá de su muerte?«.
«La revivificación es un intento de arrojar luz sobre las posibilidades, a veces oscuras, de prolongar la presencia de una persona más allá de la aparente finalidad de la muerte», explican.