NUEVA YORK – El destino de las comidas bajo techo en Nueva York dependerá de las tasas de hospitalización del estado, dijo el lunes el gobernador Andrew Cuomo.
Cualquier región con una tasa de hospitalización inestable durante más de cinco días verá nuevas restricciones para comer en interiores, según el gobernador.
En la ciudad de Nueva York, el comedor interior cerraría por completo. En el resto del estado, el comedor interior se reduciría al 25% de su capacidad.
Cuomo también advirtió que la ciudad de Nueva York podría ver las nuevas restricciones a partir del lunes si las tasas de hospitalización no se estabilizan.
Más de 4,600 pacientes con COVID-19 ahora están hospitalizados en todo el estado, el doble de la cantidad reportada el 18 de noviembre.
El Departamento de Salud ordenó el lunes a los hospitales aumentar la capacidad de camas en un 25% y dejar un 25% adicional de capacidad en reserva, dijo Cuomo.
El gobernador también reconoció los problemas de personal y pidió que todos los médicos y enfermeros jubilados que estén capacitados regresen al servicio.
Si la capacidad hospitalaria de una región se vuelve crítica, se la designará como una “zona roja” y todas las empresas no esenciales se verán obligadas a cerrar, según el gobernador.
La capacidad crítica del hospital está determinada por el plan de respuesta flexible y de aumento de la región. Si la tasa de hospitalización promedio de siete días de la región muestra que dentro de tres semanas la región alcanzará la capacidad hospitalaria crítica o el 90% de la capacidad hospitalaria, se promulgará “NY Pause”.
Cuomo dijo que el estado aún no se encuentra en un nivel crítico de pacientes con COVID-19, pero el crecimiento continuo es preocupante.
Esta historia incluye reportajes de The Associated Press.
