
Elon Musk apareció con un ojo morado durante su despedida oficial del gobierno de Donald Trump en el Despacho Oval de la Casa Blanca, un detalle que llamó la atención de los medios de comunicación que estaban en la residencia oficial y que generó especulaciones sobre el origen de la lesión.
El propio empresario aclaró que el moretón fue resultado de un accidente doméstico: su hijo de 5 años le propinó un golpe jugando. Le restó importancia al incidente y lo tomó incluso con humor.
“Solo estaba bromeando con el pequeño X y le dije: ‘anda, golpéame en la cara’, y lo hizo. Resulta que incluso un niño de 5 años te golpea en la cara”, aseguró.
Donald Trump también expresó sus inquietud por el moretón en el rostro de Musk: “Yo no lo había notado. ¿Fue X quien te hizo eso?”, preguntó al magnate dueño de la red social X y Tesla, quien respondió “sí” entre risas.
Elon Musk se despidió del DOGE
El viernes pasado, Elon Musk se despidió tras 130 días al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental. El encuentro en el Despacho Oval marcó el fin de una etapa en la que implementó recortes drásticos en el gasto federal estadounidense, una misión ordenada y reconocida por Trump.
Musk logró reducir el gasto en aproximadamente 175,000 millones de dólares, pero se mostró frustrado por la burocracia y los obstáculos que encontró, además de criticar abiertamente el “gran y hermoso proyecto de ley” fiscal del mandatario republicano, que consideró un aumento del déficit presupuestario y un retroceso para su trabajo.
La relación entre Musk y Trump, que comenzó con gran entusiasmo y colaboración, se fue enfriando progresivamente. El empresario se distanció de la política activa y anunció que dejaría su cargo para concentrarse en sus empresas como Tesla y SpaceX.
A pesar de las diferencias, Musk afirmó que seguiría siendo un “amigo y consejero” del presidente, aunque dejó claro que no quería asumir responsabilidad por todas las políticas del gobierno republicano, especialmente aquellas con las que discrepaba.
Donald Trump reconoció la labor de Musk y destacó su “trabajo incomparable” y el impacto de su gestión en la Casa Blanca, aunque la alianza política mostró signos evidentes de desgaste por desencuentros y críticas mutuas.
“Es uno de los líderes empresariales e innovadores más grandes que el mundo haya dado”, afirmó el presidente, quien destacó el trabajo de Musk como “empleado especial del gobierno”.