Un fiscal peruano solicitó el jueves 30 años de cárcel para la candidata presidencial Keiko Fujimori y la disolución de su partido por supuestamente lavar dinero de la constructora brasileña Odebrecht y de otros peruanos millonarios que aportaron en secreto a sus anteriores campañas políticas.
El pedido de cárcel se produce a un mes de las elecciones más importantes de Perú, en las que los votantes elegirán un nuevo presidente y 130 legisladores para el periodo 2021-2026.
El fiscal José Domingo Pérez llegó a un juzgado junto a cinco bloques que contenían más de 15,000 páginas de su investigación de dos años. La hija del condenado expresidente Alberto Fujimori (1990-2000) también está acusada de crimen organizado, obstrucción a la justicia y falsa declaración.
La acusación también pide prohibirle la salida del país por 36 meses mientras dura el juicio, la disolución de Fuerza Popular -el partido que Keiko Fujimori fundó en 2010- y la liquidación de una empresa inmobiliaria de su esposo, el estadounidense Mark Villanella.
Perú celebrará sus elecciones presidenciales el 11 de abril y Keiko Fujimori es una de los 19 candidatos. Si ninguno logra obtener más de 50% de los sufragios los dos más votados pasarán a una segunda vuelta en junio y ganará el que consiga más votos.
La candidata presidencial de 45 años dijo en sus redes sociales que “por más que un fiscal quiera ahora meterse en la recta final de la primera vuelta, yo seguiré enfrentado esta persecución y avanzando con energía para que juntos podamos superar esta emergencia sanitaria y económica”.
Esta la tercera vez que Keiko Fujimori se postula. Antes lo hizo sin suerte en 2011 y 2016.
El fiscal Pérez dijo más tarde a la prensa que la respuesta de Keiko incita a “la agresión” sobre él y muestra “un desprecio a los funcionarios que cumplen su función de perseguir el crimen y acusar”.
Pérez afirmó que la candidata habría recibido más de un millón de dólares de Odebrecht que lavó mediante el uso de aportantes, rifas y cócteles como fachada.
Agregó que también habría recibido dinero de Dionisio Romero Paoletti, presidente del banco más importante de Perú, llamado Banco de Crédito, así como de empresarios de la leche y de propietarios de casinos a cambio del apoyo de los legisladores fujimoristas.
El fiscal también incluye en su acusación que Fujimori recibió dinero del peruano Luis Calle, acusado por Estados Unidos de ser un narcotraficante miembro de una red internacional de lavado de dinero para otros narcos de Colombia y Oriente Medio. Fujimori reconoció en 2013 que Calle había aportado 12,349 dólares y que iba a devolverle el dinero pero afirmó que no lo conocía.
La candidata estuvo presa durante más de 16 meses entre 2019 y 2020, cumpliendo dos órdenes de detención solicitadas por el fiscal.
De acuerdo con diversas encuestas, Fujimori no encabeza las preferencias de los peruanos como en 2016.
Los votantes peruanos se encaminan a las elecciones en medio de una apatía generalizada causada por los efectos de la pandemia del nuevo coronavirus, que ha dejado hasta ahora más de 1,38 millones de contagiados y más de 48,300 muertos según el Centro de Ciencia e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins.