Ciudad de Panamá, (EFE) – El Gobierno panameño implementó multas que oscilan entre mil y cinco mil dólares para todos los extranjeros que ingresen al país de manera irregular a través de la frontera con Colombia. Esta medida, enmarcada en el Decreto Ejecutivo 194, se publicará en la Gaceta del Estado el 25 de octubre, y busca hacer frente al alarmante aumento del flujo migratorio irregular por la selva del Darién.
El decreto establece que cualquier persona extranjera que cruce los puestos de control migratorio oficiales será considerada en infracción y estará sujeta a sanciones. Las multas se determinarán según la gravedad de la infracción, y los infractores no podrán salir de Panamá sin antes haber pagado la multa correspondiente. Si no cuentan con los recursos necesarios, se procederá a su deportación conforme a las leyes de Migración.
Sanciones progresivas
La normativa establece un esquema de multas progresivas: 300 dólares para la primera infracción, 600 para la segunda, 900 para la tercera y mil dólares para cada infracción subsiguiente. Estas sanciones se aplicarán a cada extranjero que ingrese irregularmente por la frontera colombo-panameña.
Además, el decreto considera las “condiciones de vulnerabilidad” de los migrantes, lo que podría influir en el monto de la multa. Los extranjeros deberán cancelar la sanción antes de salir del país hacia Costa Rica.
Operación flujo controlado
El decreto también hace hincapié en la Operación Flujo Controlado, que tiene como objetivo asegurar el tránsito de migrantes irregulares a lo largo de la frontera, brindándoles servicios básicos y asistencia humanitaria. Esta iniciativa se desarrolla en un marco de respeto a los derechos humanos y protección contra redes criminales.
Hasta el 13 de octubre, un total de 274,444 migrantes irregulares habían llegado a Panamá por la selva, lo que representa una disminución del 36.5 % en comparación con el mismo periodo de 2023. La embajada de EE.UU. en Panamá ha informado que un acuerdo bilateral ha contribuido a reducir el tránsito de ciudadanos ecuatorianos y colombianos a través del Darién en un 92 % y un 65 %, respectivamente.
Repatriación y contexto migratorio
El acuerdo firmado el 1 de julio entre Panamá y Estados Unidos incluye la repatriación aérea de migrantes irregulares que hayan cruzado el Darién, con Estados Unidos financiando los vuelos. Hasta la fecha, se han deportado casi 800 migrantes en 20 vuelos financiados por EE.UU.
Los migrantes de Colombia y Ecuador son algunos de los principales grupos que atraviesan la selva en su camino hacia Norteamérica. Aunque los venezolanos también forman parte de este flujo migratorio, el plan de deportación no se aplica a ellos debido a la ruptura de relaciones diplomáticas entre Panamá y Venezuela desde finales de julio.
Con estas nuevas medidas, el Gobierno panameño busca controlar el ingreso irregular de migrantes y proteger tanto a las personas en situación vulnerable como a la seguridad nacional.
