Clarence Jones, adolescente de 16 años con varios arrestos previos, murió baleado en una esquina en Harlem (NYC) por un par de hombres que iban en motonetas Razor la madrugada del ayer.
Según informó la policía de Nueva York, Jones recibió un disparo en el torso cerca de W. 124th St. y Lenox Ave alrededor de la 1:30 a.m. del jueves. Paramédicos llevaron al adolescente al Harlem Hospital, pero no pudieron salvarlo.
El menor estaba a unas nueve cuadras de su casa cuando recibió el disparo, “No sabemos qué pasó. No sabemos quién era el objetivo. Sabemos que alguien mató a nuestro sobrino. Simplemente le quitaron la vida sin sentido. Tenía solo 16 años”, dijo Desiree Murray, de 59 años, quien se identificó como tía paterna y residente del edificio donde Clarence vivía con su padre.
En el tiroteo una bala perdida atravesó la ventana de un Toyota Camry que pasaba e impactó en el reposacabezas del conductor de 51 años, quien milagrosamente no fue alcanzado.
El conductor continuó hasta W. 116th St., donde llamó a la policía. Sufrió una lesión en el oído, pero no quedó claro si la bala lo rozó, si fue alcanzado por un vidrio roto o si recibió alguna otra herida mientras esquivaba la bala. Fue atendido en el hospital Mount Sinai West.
La policía aún no ha establecido el motivo del homicidio, pero la víctima estaba en libertad condicional por un caso que involucraba al menos un robo armado, y era sospechoso de otro caso similar que tuvo lugar en 2023 a dos cuadras de su casa.
En ese caso, en el que nadie ha sido arrestado, cuatro delincuentes entraron en una tienda, saltaron el cristal de seguridad y sacaron dinero de la caja registradora, mientras uno de los ladrones blandía un arma.
Murray reconoció que el adolescente se había involucrado con malas compañías, pero afirmó que tenía metas para una vida diferente.
Alicia Cox, otra vecina que también se identificó como tía, dijo que el edificio quedó devastado. “No tiene sentido y la violencia con armas de fuego tiene que parar”, afirmó. “Como edificio, como bloque, todos estamos muy unidos. Como inquilinos, todos nos cuidamos unos a otros. Y luego este falso alcalde (Eric Adams) dice que el crimen ha bajado, que no hay crimen, que la violencia con armas de fuego es muy baja. Pero está sucediendo constantemente una y otra vez y estamos hartos. Estoy harta de ver a las madres llorar por sus hijos muertos”.
No se han realizado arrestos ni identificado sospechosos. Quien posea información debe llamar a 1-800-577-TIPS (8477) y en español 1-888-57-PISTA (74782). También a través de la página crimestoppers.nypdonline.org o por mensaje de texto a 274637 (CRIMES), seguido por TIP577. Todas las comunicaciones son estrictamente confidenciales.
La violencia armada es contante en Nueva York y algunas víctimas son alcanzadas al azar en calles, escuelas, el transporte público y negocios. Los enfrentamientos suelen estar vinculados con una batalla entre pandilleros por el territorio y los sospechosos a veces se incriminan al alardear y publicar sobre sus crímenes en las redes sociales.
La semana pasada tres adolescentes fueron arrestados como sospechosos de la muerte de Vernard Floranda, en una balacera que además dejó herido a un hombre de 26 años a principios de este mes en una bodega mexicana en el Alto Manhattan. La víctima de 46 años trabajaba como sommelier en el Café Boulud, propiedad del famoso chef Daniel Boulud.
