NUEVA YORK – Más de 85 organizaciones puertorriqueñas que abogan desde Estados Unidos por las necesidades de este territorio enviaron una carta a los principales líderes demócratas en el Congreso federal, la representante Nancy Pelosi y el senador Chuck Schumer, para que le den prioridad a la legislación presentada por las representantes Nydia Velázquez y Alexandria Ocasio-Cortez, para impulsar una Asamblea Constitucional de Estatus como solución al problema colonial en la isla.
La misiva que circula desde ayer en la página web de Power4PuertoRico, una de las entidades que firma el documento, plantea que la propuesta del “Puerto Rico Self-Determination Act” introducida en la Cámara de Representantes en agosto del año pasado es la “mejor” legislación y “realmente democrática” para resolver el problema del estatus político de la isla que los puertorriqueños enfrentan desde hace 123 años.
Según los suscribientes de la carta, la propuesta para una Convención de Estatus es la forma más inclusiva para someter todas las opciones no coloniales a los puertorriqueños y que éstos decidan.
“Progresistas alrededor del país siguen de cerca los debates actuales sobre Puerto Rico. Como ustedes saben, hay diferentes opiniones sobre cómo resolver el estatus colonial. Sin embargo, solo los puertorriqueños deben tener la autoridad y el derecho para decidir el futuro de Puerto Rico. A esta fecha, no ha habido un proceso justo, transparente y vinculante a nivel federal para que los puertorriqueños determinen su estatus político. Ya es hora de que eso cambie y por eso es que nosotros urgimos su apoyo para respaldar el derecho al proceso de autodeterminación que sea justo e inclusivo de todas las opciones no territoriales”, inicia la carta.
Un referéndum no inclusivo ni decisivo
A juicio de los miembros de las organizaciones que incluyen a SEIU, Black Lives Matter Greater New York, Vamos Puerto Rico, Florida Immigrant Coalition, Faith in Action, Indivisible y Open Society Policy Center, el pasado referéndum del 3 de noviembre impulsado por el oficialista Partido Nuevo Progresista, cuyos líderes favorecen la estadidad para la isla, no fue un proceso integrador y decisivo, ya que entre otras cosas, solo participó poco más del 50% de los electores registrados para votar.
“Mientras algunos pueden argumentar que la opinión puertorriqueña en cuanto al estatus político se resolvió con los resultados del referéndum administrados durante la elección del 3 de noviembre del 2020, ese no es el caso por dos razones. Primero, solo el 54.72% de los electores registrados participaron en el referéndum, convirtiendo el estrecho margen por el que el ‘sí’ a la estadidad ganó (52.52%) no decisivo. Segundo, el referéndum — un ‘sí’ o un ‘no’ por la estadidad — no fue vinculante, no incluyó un plan de transición o una campaña educativa sobre las consecuencias del voto, y no incluyó otras opciones de estatus político”, enumeran las grupos a favor del proyecto de las representantes demócratas de Nueva York.
“Esto no es un sustituto para el proceso deliberativo que contempla el Acta de Autodeterminación de Puerto Rico, mediante el cual miembros electos democráticamente para la convención de estatus consultan con la comisión del Congreso definiciones y planes de transición para las distintas opciones de estatus, con Puerto Rrico decidiendo finalmente su futuro político con un voto final”, amplía el documento.
Los activistas además destacan en la carta que la Asamblea Constitucional de Estatus va en la línea del curso de acción de libre determinación que favorece el presidente Joe Biden para solucionar el problema político de Puerto Rico, ya que incluye a representantes de las distintas opciones de estatus.
La Legislatura de Puerto Rico sería la encargada de iniciar el proceso para crear la Convención, cuyos delegados deberán ser elegidos por los votantes puertorriqueños. La medida dispone para que una comisión negociadora del Congreso responda a las preguntas claves sobre el proceso de transición de estatus como el pago de impuestos federales, idioma, entre otros.
Este proceso no se ha realizado en Puerto Rico, un “Estado Libre Asociado” no reconocido por el derecho internacional, a pesar de los siete referéndums impulsados por los partidos políticos de mayoría y realizados desde el 1967.
“Este organismo desarrollaría una solución a largo plazo para el estatus de Puerto Rico, ya sea la estadidad, la independencia, la libre asociación o cualquier otra opción que no sea el ordenamiento territorial actual”, indicaron Velázquez y Ocasio Cortez en una columna en NBC poco después de presentar la legislación.
Gobernador de Puerto Rico y comisionada residente en Washington impulsan otro proyecto de ley
El gobernador de Pedro Pierluisi y la comisionada residente en Washington, Jennifer Gonzalez – sin derecho al voto en el Congreso, van por la línea opuesta a la de los demócratas y así lo dejaron constar durante su gestión en el Capitolio federal esta semana.
Los líderes boricuas respaldaron la legislación del representante de Florida, Darren Soto, para que la isla sea admitida como estado de la unión de inmediato.
Pierluisi viajó a principios de esta semana a la capital federal para participar de la radicación del proyecto de admisión que fue sometido por González y Soto, nombrado “Puerto Rico Statehood Admissions Act”.
La medida establece que, de ser aprobada en el Congreso, los puertorriqueños en la isla participarán de una elección federalmente vinculante impulsada por el Gobierno local para decidir si la isla debe ser integrada de inmediato como estado 51 de EE.UU. Si la mayoría favorece la estadidad, el presidente de EE.UU. debe confirmar los resultados y establecer una fecha en la que la isla pasaría oficialmente a ser estado.
La comisionada residente explicó en una conferencia de prensa frente al Capitolio que ésta es la primera vez que el Gobierno de Puerto Rico formalmente le solicita al presidente y al Congreso que admita a la isla como un estado. “Esto nunca ha pasado antes. Así que yo pienso que es un momento crucial en la historia para hacer que las cosas pasen”, planteó González quien además destacó el carácter bipartidista de la propuesta de ley.
No está claro cómo el referéndum realizado en noviembre pasado se complementará, si de alguna forma, con las disposiciones de la propuesta de ley presentada en el Congreso.
El Diario de Nueva York se comunicó con el personal de prensa de Pierluisi hace semanas para pedirle una entrevista sobre éste y otros temas y aún este medio no ha recibido respuesta a la solicitud.