El líder de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell, dijo este martes que la Cámara Alta suspenderá su trabajo por las vacaciones de Navidad hasta que se apruebe un nuevo paquete de ayudas por la pandemia de coronavirus. El republicano agregó que apoya la posición de dejar hasta el año que viene la discusión de las cuestiones más controvertidas con tal de alcanzar un acuerdo.
Los legisladores trabajan para cerrar un trato como tarde este viernes, el día en que se acabará el plazo del Congreso para aprobar una ley que garantice la financiación del Gobierno. Líderes de ambos partidos esperan poder acoplar a esa ley el paquete de ayudas por el COVID-19.
“No nos vamos, se lo aseguro. No nos vamos hasta que terminemos este paquete”, prometió McConnell, senador por Kentucky.
El líder republicano afirmó que él apoya la idea de dejar para más adelante “los dos temas más discutidos en este momento”, es decir, las medidas para proteger a los empleadores de demandas relacionadas con el COVID-19 y la financiación para los Gobiernos estatales y locales, asuntos que han estancado las negociaciones e impedido que el Congreso aprobara cualquier medida significativa por la pandemia desde marzo. “No es que no tendremos ocasión para discutirlas”, dijo McConnell.
Tras un encuentro con los líderes del Congreso, ocurrido este martes por la noche, el senador republicano afirmó: “Estamos dando pasos hacia adelante significativos, que nos permitirán llegar a una conclusión común pronto”.
“No voy a entrar en detalles específicos, pero creo que hay un deseo genuino de llegar a un acuerdo por las cuatro partes”, dijo por su lado Chuck Schumer, líder de la minoría demócrata del Senado. “[El acuerdo ] está más cerca”, agregó.
En ambos partidos crece el número de voces favorables a la posibilidad de que se aplace la discusión de los puntos más críticos de la negociación. El objetivo es que se llegue a algún tipo de ayuda antes de las vacaciones navideñas.
Un grupo bipartidista de legisladores puso encima de la mesa dos propuestas de paquete: una que contempla las protecciones a los empleadores y la financiación a las administraciones locales, y una sin estos puntos.
Hasta algunos demócratas previamente reacios a dejar de lado la cuestión de la ayuda a los Gobiernos estatales y locales han remarcado su disponibilidad a llegar a un acuerdo. Steny Hoyer, líder de la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes, dijo el domingo que el Congreso tiene que apoyar a los estadounidenses en superar las dificultades actuales, aunque la ayuda a los Gobiernos locales sea de “importancia crítica”.
McConnell hizo mención a estos comentarios en sus declaraciones del martes, al mantener que “es bastante evidente que la manera de alcanzar un acuerdo ha sido por semanas la que he dicho yo y que sugieren también Steny Hoyer y el grupo bipartidista”.
Después de dos reuniones en la suite del Capitolio de la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, donde su partido presionó por pasos más generosos para ayudar a las personas, el líder de la minoría de la Cámara de Representantes Kevin McCarthy, un republicano por California, se mostró optimista. “Creo que hemos construido mucha confianza”, dijo McCarthy, y agregó que opina que existe la posibilidad de lograrlo.