El sospechoso de intentar secuestrar a una menor de 11 años en una parada de autobús en el condado Escambia, en Florida, fue identificado por las autoridades como Jared Paul Stanga, de 30 años. El tener en los brazos rastros de limo azul que la niña tenía consigo en el momento del ataque ayudó a los oficiales a reconocer al agresor.
Aunque en un principio informes de prensa indicaban que el hombre sería de origen hispano, las autoridades no han divulgado su etnicidad.
“Este animal está fuera de las calles”, dice alguacil del condado Escambia
Stanga enfrenta cargos de intento de secuestro de una menor, asalto agravado y agresión, según la Oficina del Alguacil del Condado Escambia.
“Este animal está fuera de las calles”, declaró a los medios el alguacil del condado de Escambia, Chip Simmons, quien nuevamente elogió la valentía de la niña que peleó hasta zafarse del presunto atacante.
Stanga, que fue detenido ayer, carga con antecedentes por delitos sexuales contra menores. El hombre vivía cerca de la escuela donde ocurrieron los hechos la mañana de ese día.
Las autoridades dieron con el implicado luego de examinar la grabación de una cámara de seguridad cercana en la que se ve el momento en que el hombre da vueltas por donde se encuentra la niña hasta que detiene la camioneta blanca, sale corriendo y se le tira encima a la jovencita con un cuchillo.
La menor lucha hasta caer al suelo y el hombre huye en el vehículo.
Varias pistas llevaron a la detención del presunto pervertido
La Policía siguió el movimiento del sujeto hasta que se paró en una gasolinera Murphy Express minutos después del ataque. Cuando el individuo entró en la tienda para hacer unas compras, utilizó su número de teléfono, lo anterior también ayudó a ubicarlo.
Adicional, compañeros de trabajo de Stanga indicaron a las autoridades que el hombre estacionó su vehículo detrás de un granero en el lugar de trabajo y que se comportó de forma poco habitual durante todo el día, además de apartarse para responder a las llamadas de su esposa, según el reporte de USA Today.
En una audiencia ayer en una corte del condado, el fiscal Erin Ambrose catalogó a Stanga como una clara amenaza para la comunidad.
“El señor Stanga, a la luz del día, atacó a una niña en una parada de autobús en una carretera muy transitada con un cuchillo e intentó meterla en su auto. Es obviamente una amenaza para esta comunidad”, planteó Ambrose.
Por su parte, el abogado de Stanga, Robert Dees, alegó que las autoridades habrían detenido a la persona incorrecta. Entre otras cosas, argumentó que la víctima no pudo seleccionarlo contundentemente en una rueda de reconocimiento fotográfica y que inicialmente describió al sospechoso como hispano y Stanga es caucásico.
La jueza Kerra Smith le impuso una fianza de $1 millón de dólares por el cargo de intento de secuestro, $500,000 dólares por el cargo de agresión con agravantes y $5,000 dólares por el cargo de agresión. No está claro si el hombre pagó la fianza.
Menor le pegó limo azul al sospechoso
Rastros de limo azul que manejaba la menor también forman parte de la evidencia. La menor Alyssa Bonal indicó a Pensacola News Journal que le pegó el limo a su atacante para que pudiera ser identificado más fácilmente.
En una entrevista junto a su madre Amber Bonal, la jovencita dijo que aprendió esa técnica viendo los episodios del programa “Law & Order: SVU”.
“Sus primeras palabras fueron, ‘alguien trató de secuestrarme. El me agarró por la garganta y tenía un cuchillo’. Ella dijo que pudo patearlo, que lo hizo tropezar y se pudo zafar”, relató la progenitora. “Ella dijo, ‘mamá, yo tenía que dejar algún tipo de evidencia, como en Law & Order SVU.’ Nosotros probablemente hemos visto todos los episodios en Hulu. Ella es una chica inteligente, ella piensa por sí mismo. Ella carga con ese limo a todas partes”, declaró Amber.