
Para una amplia mayoría de peruanos, está más que claro que Nicolás Maduro es un dictador (87%). Pero no solo ello. También es considerado como el gobernante, a nivel mundial, con mayor influencia negativa en el Perú (58%) y, además, concentra la mayor antipatía de la ciudadanía (72%) entre los líderes de Latinoamérica, según una encuesta a escala nacional de Datum Internacional para El Comercio.
En contrapartida, el estudio ―realizado entre el 31 de enero y el 5 de febrero― recoge que Donald Trump, presidente de Estados Unidos (EE.UU.), así como Vladimir Putin, mandatario de Rusia, son ubicados por los peruanos como los líderes mundiales que les generan más simpatía, con 17% y 15%, respectivamente. Esto incluso cuando un 43% ya estima que la presencia de Trump en el gobierno será negativa para el Perú, mientras que un 41% opina lo contrario. Las posturas frente a ello están divididas.
En tanto, a nivel de los presidentes latinoamericanos, tiene un mayor respaldo Nayhib Bukele de El Salvador (40%) y, en segundo lugar, Javier Milei de Argentina (14%). De hecho, un 55% asegura simpatizar mucho con el tipo de gobierno del país centroamericano y es el segundo país más admirado (13%), después de EE.UU. (16%). Argentina, por su parte, es considerado el país más amigo del Perú.
Los internacionalistas Juan Velit y Francisco Belaunde coincidieron en que el rechazo a Maduro tiene que ver con la migración registrada en Perú. Velit incidió en que sus actos dictatoriales “tienen un impacto en nuestro país en directo”, al recordar que el Perú recibió 1 millón 200 mil venezolanos por la crisis. Y Belaunde refirió que la migración, consecuencia de régimen de Maduro, es relaciona por muchos con el aumento de la delincuencia y el avance del Tren de Aragua.
“El Perú primero ha sido receptor de casi 1 millón 200 mil migrantes venezolanos expulsados por la dictadura de Maduro por las condiciones infrahumanas, por los sueldos bajísimos, porque no había alimentación, etcétera. Y ello ha sensibilizado mucho a la población peruana. En segundo nivel, es reconocido como un dictador cruel, prepotente, que además ha aplicado una serie de medidas, especialmente las últimas después de las elecciones donde de manera evidente triunfó Edmundo González Urrutia y no quiso reconocer ese triunfo. Todo ello tiene un impacto en la población”, remarcó Velit.
Belaunde indicó que la postura adoptada por el gobierno de la mandataria Dina Boluarte, que reconoció a González como presidente electo de Venezuela e incluso lo recibió en Palacio de Gobierno semanas atrás, no reforzó la percepción negativa de los peruanos respecto de Maduro. “Ella lo que ha hecho es ponerse en sintonía en lo que creo que ya era un sentimiento que existía, con lo que la mayoría pensaba. No creo que haya tenido mucha influencia en este sentimiento negativo, que creo que tiene que ver mucho más con todo lo que hemos visto, temas migratorios básicamente”, refirió.
Velit también apuntó que el hecho de que figuras como Trump o Putin, con perfiles fuertes, generen simpatías entre los peruanos bien puede dar una imagen de lo que está buscando el electorado peruano de cara a las próximas elecciones. Ello, en medio de una escalada de inseguridad aún por resolver.
La gran mayoría siente que los gobiernos duros ponen orden en el país, alejan a la delincuencia (…) Antes era el tema económico, pero de unos años para acá, el tema de la inseguridad ciudadana es el que rige la selección de los actores políticos en el Perú”, acotó.
Belaunde, por su parte, apuntó que la simpatía hacia ambos líderes bien puede ser proporcional a la polémica y la presencia que generan y tienen. “Los líderes polémicos siempre son más conocidos y, por tanto, también generan opiniones”, aseveró.