
Estados Unidos. La NBA dio un paso trascendental hacia la modernización tecnológica al implementar un sistema de arbitraje automatizado con inteligencia artificial (IA), diseñado para aumentar la precisión en las decisiones y acelerar el ritmo de los encuentros, según reportó The Associated Press.
El nuevo sistema combina sensores, cámaras de alta velocidad y algoritmos avanzados para analizar en tiempo real las jugadas más polémicas. Su objetivo no es reemplazar a los árbitros humanos, sino apoyar su labor y eliminar el margen de error en situaciones objetivas.
Un ejemplo reciente de su efectividad ocurrió durante la pasada temporada, cuando LeBron James anotó el punto decisivo en un partido entre los Los Angeles Lakers y los Indiana Pacers. Aunque la jugada generó dudas sobre una posible infracción, tanto la revisión arbitral como el sistema automatizado confirmaron la validez del enceste, descartando cualquier interferencia ofensiva.
Evan Wasch, vicepresidente ejecutivo de Estrategia y Análisis de Baloncesto de la NBA, explicó que esta tecnología permite reconstruir las jugadas con exactitud milimétrica, ofreciendo transparencia tanto a jugadores como al público. “Si invertimos en esta tecnología para acertar más en las jugadas objetivas, logramos dos cosas: más precisión y árbitros más concentrados en las jugadas complejas”, afirmó Wasch.
El sistema se basa en una red de cámaras inteligentes y sensores distribuidos por todo el estadio, los cuales rastrean el movimiento del balón, los pies y las manos de los jugadores con una precisión excepcional. Los datos recolectados son procesados por algoritmos de aprendizaje automático, que determinan lo ocurrido en cada acción y generan una reconstrucción digital exacta.
De esta manera, el sistema contribuye a resolver jugadas límite, como balones fuera de banda o situaciones de interferencia en el aro, aportando imágenes generadas por computadora que se muestran para respaldar las decisiones arbitrales.
El uso de esta tecnología también impacta positivamente en la dinámica del juego, al reducir los tiempos de revisión y garantizar un arbitraje más rápido y justo. Doc Rivers, entrenador de los Milwaukee Bucks, destacó la relevancia del avance: “Vamos a hacerlo bien, y vamos a hacerlo más rápido”.
La colaboración entre el sindicato de árbitros y la liga ha sido clave para integrar el sistema en la rutina diaria de la competición, con el propósito de mantener la justicia y la transparencia sin alterar el flujo del juego.
Este movimiento sitúa a la NBA a la vanguardia entre las ligas deportivas del mundo en cuanto al uso de la inteligencia artificial en el arbitraje. De hecho, otras disciplinas como el béisbol profesional estadounidense también experimentarán con los llamados “umpires robot” a partir de la próxima temporada, lo que demuestra una tendencia creciente hacia el arbitraje tecnológico en el deporte moderno.