A casi dos semanas para que se acabe el 2020, aún los legisladores en el Congreso de Estados Unidos no han podido llegar a un acuerdo que permita la aprobación de nueva ayuda económica para las millones de personas afectadas por la pandemia del coronavirus.
Esta semana se cumple otro plazo más sin que demócratas y republicanos hayan alcanzado un feliz término en las negociaciones que facilite la distribución de nuevos incentivos para paliar los efectos económicos de la crisis sanitaria.
Los trabajos legislativos concluyeron este jueves sin que se le haya dado paso a legislación de rescate en medio de la tendencia al alza en el número de contagios y muertes como resultado de la COVID-19 en varios estados.
Si no se alcanza un acuerdo pronto, al menos 12 millones de personas que han perdido sus empleos no contarían con las ayudas adicionales por desempleo a partir del 26 de diciembre y otros tantos no se podrán amparar en la moratoria federal que les ayuda a pelear antes los tribunales sus casos de desalojo por deudas en el pago de la renta.
La buena noticia
En medio del estancamiento en las negociaciones, la buena noticia es que tanto la Cámara de Representantes como el Senado se pusieron de acuerdo en una ley de gastos a corto plazo para mantener abiertas las agencias federales hasta el 18 de diciembre.
Como parte de esa extensión, los legisladores ahora tienen más tiempo para discutir un nuevo plan de estímulo.
Actualmente, dos borradores compiten ante el Congreso federal para convertirse en ley.
El primero contiene la propuesta bipartidista presentada por senadores valuada en $908,000 millones de dólares.
El plan incluye una ampliación a los beneficios por desempleo a $300 semanales hasta marzo más no cheques de estímulo.
Esta oferta cuenta con el aval preliminar de los principales líderes demócratas.
La segunda propuesta anunciada por la Casa Blanca y a la que se inclinan los republicanos dispone para cheques de estímulo de $600.
La medida estimada en $916,000 millones fue catalogada como “inaceptable” por miembros de la delegación demócrata como la representante Nancy Pelosi y el senador Chuck Schumer, ya que no contempla ayudas adicionales por desempleo.