El campeón del mundo de UFC, el ruso Khabib Nurmagomedov, arremetió este viernes contra el presidente francés Emmanuel Macron y contra sus “discípulos” por defender las caricaturas de Mahoma.
Originario de Daguestán, una república de Rusia de mayoría musulmana, Khabib Nurmagomedov publicó en su cuenta de Instagram, seguida por 25 millones de personas, una fotografía del presidente galo con una huella de pisada estampada sobre el rostro.
“Que el Todopoderoso desfigure a esta basura y a todos sus discípulos, que en el nombre de la libertad de expresión insultan la fe de más de mil millones y medio de musulmanes”, escribió el luchador en un mensaje escrito en ruso y en árabe.
Emmanuel Macron en el posteo de Instagram de Khabib Nurmagomedov (Crédito: Instagram khabib_nurmagomedov)
“Créanme, estas provocaciones tendrán para ellos graves consecuencias porque los piadosos tienen siempre la última palabra”, prosiguió Nurmagomedov, de 32 años, quien anunció el domingo su retirada deportiva para cumplir una promesa realizada a su madre.
Emmanuel Macron defendió las caricaturas del profeta Mahoma después del asesinato de un profesor francés a manos de un islamista a mediados de octubre. El profesor, Samuel Paty, había mostrado una de esas caricaturas durante una clase sobre la libertad de expresión.
Desde entonces, manifestaciones contra Macron y llamamientos al boicot de productos franceses tuvieron lugar en países de mayoría musulmana.
Este martes, el dirigente de la república rusa de Chechenia Ramzan Kadyrov, había criticado con dureza a Macron, tratándolo de “terrorista” que “llama secretamente a los musulmanes a cometer crímenes”.
El presidente francés Emmanuel Macron. Thibault Camus/Pool via REUTERS
La revista satírica francesa Charlie Hebdo publicó las caricaturas mostradas por Paty en 2006 después de que su publicación por un periódico danés provocase la cólera de numerosos musulmanes en el mundo. En 2015, sus miembros fueron víctimas de un atentado yihadista que causó 12 muertos.
En las semanas desde el asesinato de Paty tuvieron lugar otros ataques de esa naturaleza. El jueves, un tunecino de 21 años asesinó a tres personas en la iglesia de Niza, y decapitó a una de ellas. El mismo día, la policía del país abatió a un hombre en la ciudad de Aviñón luego de que amenazara con una arma a unos agentes. Y un guardia de seguridad del consulado francés en Arabia Saudita fue acuchillado.
El viernes, además, la policía abatió a un joven que gritaba “Allahu Akbar” (“Alá es grande”) luego de apuñalar a un oficial e intentar prender fuego una comisaría de policía en una región de Rusia de mayoría musulmana. El joven de 16 años, quien estaba armado con un cuchillo y una bomba Molotov, infligió múltiples heridas a un oficial de policía antes de ser asesinado a tiros en Kukmor. Medios locales identificaron al atacante como Vitaly Antopov.
El Comité de Investigación de Rusia calificó el incidente como un “intento de acto terrorista” e informó que fue abierto un caso penal.
La agencia de noticias rusa Interfax aseguró que el adolescente había gritado “Allahu Akbar” y que llamó a la policía “infieles” durante su asalto en la región de Tatarstán.