El jefe militar de Israel dijo a las tropas este miércoles que sus ataques aéreos en Líbano tenían como objetivo destruir la infraestructura de Hezbollah y preparar el camino para una posible incursión terrestre por parte de las fuerzas israelíes.
“Ustedes escuchan los aviones sobrevolando; hemos estado atacando todo el día”, dijo a las tropas Herzi Halevi, jefe del ejército de Israel, mientras visitaba la frontera norte del país con Líbano.
“Esto es tanto para preparar el terreno para su posible entrada como para seguir degradando a Hezbollah”, añadió.
El objetivo de la incursión es permitir que las decenas de miles de israelíes que han sido desplazados por el fuego transfronterizo en el norte del país regresen a sus hogares, dijo Halevi.
“Para lograr eso, estamos preparando una maniobra”, dijo. “Significa que sus botas militares, sus botas de maniobra, entrarán en territorio enemigo, entrarán en aldeas que Hezbollah ha preparado como grandes puestos militares”.
Entrar en Líbano “les demostrará lo que significa enfrentarse a una fuerza profesional, altamente capacitada y con experiencia en combate”, dijo Halevi.
Los comentarios se producen después de que Israel intensificara sus ataques aéreos en Líbano y derribara un misil que Hezbollah dijo haber lanzado a la sede del Mossad, la agencia de inteligencia de Israel, cerca de Tel Aviv. Fue la primera vez que el grupo militante respaldado por Irán intenta atacar tan profundamente en territorio israelí.
Anteriormente, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijeron que estaban convocando a dos brigadas de reserva debido al conflicto con Hezbollah. El principal general de Israel en el norte, Ori Gordin, también advirtió que el ejército “debe estar completamente preparado para hacer maniobras”.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que su país “no descansará” hasta que los residentes del norte puedan regresar a sus hogares.
“No puedo detallar todo lo que estamos haciendo, pero puedo decirles una cosa: estamos decididos a devolver a nuestros residentes en el norte de manera segura a sus hogares”, dijo el primer ministro, en medio de la intensa ola de ataques aéreos de Israel contra objetivos de Hezbollah en Líbano.
“Estamos infligiendo golpes a Hezbollah que [ellos] no imaginaron. Lo hacemos con poder, lo hacemos con astucia. Les prometo una cosa: no descansaremos hasta que regresen a casa”, agregó.
Israel ha intensificado drásticamente sus ataques contra objetivos de Hezbollah en Líbano este mes, mientras comienza a alejarse de su guerra de casi un año contra Hamas en Gaza.
La semana pasada, Israel hizo del regreso de los residentes a sus hogares en el norte un objetivo explícito de guerra. Al día siguiente, cientos de buscapersonas pertenecientes a militantes de Hezbollah explotaron en todo Líbano. Al día siguiente, también explotaron los walkie-talkies de Hezbollah. Los ataques gemelos mataron a decenas e hirieron a miles.
Israel no dijo que estaba detrás de los ataques, pero sí se atribuyó la responsabilidad de un ataque aéreo en el sur de Beirut al día siguiente, que mató al líder de la Fuerza Radwan de élite de Hezbollah, Ibrahim Aqil. Esta semana, otro ataque aéreo en Beirut mató a Ibrahim Qubaisi, un alto funcionario que comandaba las unidades de misiles de Hezbollah.
Tambaleándose por los golpes a su estructura militar, Hezbollah comenzó a responder, disparando cientos de misiles hacia Israel durante la última semana, pero la implacable escalada de Israel parece haber puesto al grupo a la defensiva.
“Ustedes entrarán mucho más fuertes y con mucha más experiencia que ellos”, dijo Halevi a las tropas este miércoles. “Entrarán, destruirán al enemigo allí y destruirán decisivamente su infraestructura. Estas son las cosas que nos permitirán devolver a salvo a los residentes del norte después”.
