GINEBRA.- Naciones Unidas celebra este lunes y mañana un encuentro de alto nivel para conmemorar el 75 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en el que las delegaciones israelí y palestina se acusaron mutuamente de violar este texto fundamental durante el actual conflicto en Gaza.
Según la delegación de los Territorios Palestinos, «no hay nada que celebrar» en el 75 aniversario cuando «algunos Estados han decidido excluir a los palestinos de los derechos del resto de la humanidad».
«En los últimos dos meses han muerto 7.000 niños palestinos, dos millones de personas están desplazadas, hambrientas y aterrorizadas, en una guerra genocida y contraria a la declaración» de 1948, señaló la delegación durante su turno de intervención.
Israel, por boca de su embajadora ante la ONU en Ginebra Meirav Eilon Shahar, aseguró que entre las responsabilidades adquiridas por su Estado para con los derechos humanos figura «proteger nuestra población eliminando a las organizaciones terroristas cuya intención es acabar con la vida».
Añadió que tras los ataques de Hamás ha habido un «auge del antisemitismo» contra el que Israel luchará «con un apolítica institucional de tolerancia cero» hacia los discursos de odio, la incitación a la violencia contra los judíos y la diseminación de noticias falsas.
Otras delegaciones de países miembros de Naciones Unidas participaron en el acto conmemorativo subrayando sus compromisos pasados, presentes y futuros con la declaración de 1948, expresando promesas de seguir mejorando en materia de libertades fundamentales.
La delegación de EE.UU., recordando que la declaración fue redactada por un comité presidido por Eleanor Roosevelt (viuda del presidente norteamericano Franklin D.Roosevelt) defendió que los derechos humanos «guiaron la política internacional estadounidense de posguerra».
«Queremos trabajar con defensores de los derechos humanos y comprometernos a lograr igualdad de género y racial», agregó la delegación.
La parte china aseguró que su país «protegerá los derechos humanos en el camino del país hacia la modernización», acompañados de «una democracia basada en proteger a colectivos tales como mujeres y niños» pero además «promoviendo la unidad étnica».
España subrayó su especial empeño en promover la igualdad de género para lograr una «sociedad inclusiva», México prometió tener los derechos humanos como faro en cuestiones como la atención al fenómeno migratorio o la lucha contra el narcotráfico, y Colombia recordó su objetivo de acelerar a implementación del Acuerdo de Paz «con un enfoque centrado en las víctimas y la justicia transicional»