La investigación de la Fiscalía de Manhattan contra el expresidente Donald Trump está ampliando su búsqueda a colaboradores del republicano.
El exjefe de finanzas de la Organización Trump, Allen Weisselberg, está bajo escrutinio, pero también sus hijos Barry y Jack, según un reporte de Bloomberg.
Los investigadores liderados por el fiscal Cyrus Vance analizan transacciones que involucran a los hermanos Weisselberg sobre dos pistas de hielo y el sistema de préstamo.
Se agrega que, hasta ahora, ninguno de los Weisselberg ha sido acusado de irregularidades, aunque un reporte anterior adelantó que esa familia podría terminar colaborando en las indagatorias, “darle la espalda a Trump”, a fin de evitar problemas legales.
Weisselberg papá ha trabajado para los Trump desde 1973 y sigue siendo el director financiero del grupo, el cual fue administrado supuestamente por los hijos del exmandatario, mientras él despachaba en la Casa Blanca.
Al ejecutivo de finanzas se le concedió inmunidad hace tres años por su testimonio en el caso contra el exabogado del expresidente, Michael Cohen.
El reporte agrega que la investigación de la oficina del fiscal de distrito Vance analiza los negocios de Trump con una variedad de firmas, incluida Ladder Capital, donde Jack Weisselberg es director.
Esa empresa ha prestado al menos $110 millones de dólares a las empresas de Trump, según los formularios de divulgación.
Ninguno de los miembros de la familia cuestionada ha hecho declaraciones públicas sobre su papel en la indagatoria, la cual se ha complicado para el expresidente, luego de que la Corte Suprema lo obligara a entregar sus reportes de impuestos y financieros.