
El último informe anual elaborado por diversas agencias de inteligencia en EE.UU. ha puesto de manifiesto que las dinámicas geopolíticas y militares actuales hacen que Rusia represente una amenaza duradera para Estados Unidos.
A pesar de los altos costos que ha enfrentado en su guerra contra Ucrania, el país ha demostrado una notable resiliencia, apoyada por naciones como China, Irán y Corea del Norte, informó la agencia EFE.
El análisis revela que Rusia ha tomado la iniciativa en su invasión a gran escala en Ucrania y está presionando tanto a Kiev como a sus aliados occidentales para alcanzar un acuerdo que favorezca sus intereses.
Las agencias subrayan que, aunque Putin es consciente de los riesgos económicos asociados con un conflicto prolongado, él y Zelenski podrían considerar que los peligros de una guerra más amplia son menores que aceptar un acuerdo desfavorable.
Contraste con la Administración Trump
El informe ha contrastado con las declaraciones recientes del presidente Trump, quien ha adoptado una postura más favorable hacia Vladimir Putin. En una audiencia ante el Comité de Inteligencia del Senado, Tulsi Gabbard, directora de Inteligencia Nacional, describió a Rusia como un “competidor formidable”, evitando clasificarla como una amenaza directa o adversario.
Además de Rusia, el informe también menciona a China, Irán y Corea del Norte como actores clave que representan riesgos para Estados Unidos. En particular, se señala que China es el país con mayor capacidad para amenazar los intereses estadounidenses a nivel global; sin embargo, se observa que Beijing adopta un enfoque más cauteloso en comparación con las acciones más agresivas de Moscú y sus aliados.