Este 2025, se perfila con la expectativa de varios “choques de trenes” entre factores del poder político en la ciudad de Nueva York, ante un escenario en el cual el alcalde Eric Adams ha dejado claro que quiere a toda costa establecer líneas de colaboración con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), para remover de la Gran Manzana, específicamente a los migrantes que cometan delitos.
Si el año pasado en la Gran Manzana, unas de las grandes discusiones de línea gruesa, que inició en 2024, fueron las órdenes ejecutivas municipales que limitaban a 30 y 60 días, la permanencia de los inmigrantes en los refugios, ahora lo que se perfila es la intención del alcalde de revisar las protecciones de ‘ciudad santuario’.
Es decir, esta postura del mandatario municipal entrará en la ecuación de la gran promesa de campaña del presidente entrante Donald Trump, de iniciar deportaciones masivas a inmigrantes indocumentados.
“El tiempo le dio la razón al alcalde. Los mismos factores que se oponían tajantemente a cambiar las normas de los refugios, ahora adversan a que se establezcan cambios, para que no seamos una ciudad santuario de la delincuencia. Logramos que más de 170,000 migrantes dieran su próximo paso al sueño americano. Ahora solo queremos lograr que elementos negativos, estén fuera de nuestros trenes, de nuestras calles”, explicó a El Diario un portavoz municipal.
El factor legislativo
Lo que sí queda claro, es que la mayoría demócrata progresista del Concejo Municipal y la Asamblea Estatal, ya se mueve en otra dirección: por el contrario, quieren crear más muros de contención para que el gobierno federal, tenga poca capacidad de maniobra de remover a personas sin papeles de Nueva York.
“Ni el alcalde Adams, ni Donald Trump, tendrán de parte de los legisladores locales, la mínima posibilidad de que se relajen las protecciones a nuestros inmigrantes. Más bien legislaremos para proteger a nuestras comunidades”, dijeron fuentes del partido demócrata.
El reciente hecho violento protagonizado presuntamente por un migrante guatemalteco, que prendió fuego a una mujer en un vagón del Subway en Coney Island, puso de nuevo combustible a esta polémica.
“Este hombre entró ilegalmente, fue capturado y luego volvió a ingresar, lo que plantea serias dudas sobre las fronteras abiertas y la locura de las políticas de santuario. Preguntaré al ICE para ver si tenía alguna orden de detención. No necesitamos importar criminales. ¡Cierren la frontera!”, publicó en su cuenta X, el concejal republicano de Queens, Robert Holden.
La minoría republicana de esa cámara, promueve la idea de que no tendría que haber ninguna discusión en la prioridad de remover a factores peligrosos como los que ingresaron a la Gran Manzana, durante la política de “fronteras abiertas” de la Administración Biden.
Por su parte, organizaciones de apoyo a los inmigrantes se “arremangan las camisas” para exigir la aprobación de nuevas leyes estatales que protejan de forma más categórica a los inmigrantes de la deportación, pues su temor es que detrás de esta estrategia, podrían terminar separándose miles de familias, sin antecedentes penales.
En esta dirección, Marlene Galvez, directora de políticas de inmigración de la Coalición de Inmigrantes de Nueva York (NYCI), recordó que tanto en las anteriores administraciones de Trump, como de Biden, aunque anunciaron acciones contra las pandillas, finalmente terminaron llevándose por medio a familias trabajadoras.
“Durante la actual Administración, se publicó un memo en donde se exigía a ICE, que se centrara en pandilleros. Y no fue así. No es difícil proyectar que podría pasar ahora“, indicó.
Asimismo, legisladores estatales demócratas en la próxima sesión legislativa impulsarán dos anteproyectos como ‘Nueva York para todos’ que expandiría la prohibición a todas las agencias estatales a colaborar por ICE, y otra conocida como CARE, la cual promovería más recursos para la defensa de personas sobras las cuales pesa una orden de deportación.
En este punto la gobernadora Kathy Hochul también ha mostrado su posición al advertir a medios locales que “si alguien infringe la ley, seré la primera en llamar a las autoridades federales y decir: ‘Sáquenlos de aquí’”.
¿Qué impulsó esta discusión?
Esta controversia tuvo sus primeros chispazos, cuando el pasado 27 de enero, un grupo de jóvenes migrantes que vivían en albergues, atacaron salvajemente a dos oficiales del Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD) en Times Square.
Luego a los pocos días un adolescente de 15 años, también recién llegado, disparó a una turista brasileña, en un forcejeo mientras robaba en una tienda deportiva de Manhattan…y así fueron registrándose varios delitos, hasta que se confirmó la presencia en la Gran Manzana de elementos de la peligrosa banda venezolana El Tren de Aragua, dedicada al tráfico de drogas, extorsión y tráfico humano.
El debate sobre la necesidad de revisar el estatuto de ‘ciudad santuario’, el cual prohíbe a las autoridades locales colaborar con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), tomó un tono más estridente cuando NYPD ha dado a conocer el historial de delitos cometidos por inmigrantes recién llegados en solo tres meses.
“En algunos casos tenemos a jóvenes que viven en albergues que han sido detenidos infraganti, robando en tiendas seis veces en menos de tres meses. Otros que han cometido agresiones graves a la autoridad. Y si no le tienen miedo a la policía, qué podrán esperar los civiles indefensos. Esos son casos que definitivamente hay que revisar por la seguridad pública”, estimó una fuente de la Uniformada.
El alcalde aunque no ha mostrado claramente las órdenes ejecutivas que podría promover, ha sugerido que se debería permitir a la policía cooperar con el ICE para ayudar a deportar a inmigrantes no autorizados acusados de delitos, en lugar de solo a aquellos que han sido condenados. También ha discutido la ampliación de la lista de condenas penales que desencadenarían la cooperación policial con el ICE.
Hochul también ha expresado su apoyo a perseguir a los no ciudadanos que han cometido delitos.
¿Cómo son las leyes actuales?
El Concejo Municipal aprobó la primera ley de santuario en 2011, que luego se fortaleció con varias reformas durante el mandato del alcalde Bill de Blasio, el cual coincidió con el primer mandato de Trump de 2017 a 2021.
Según las leyes, las cárceles y la policía de la ciudad tienen prohibido cumplir con las solicitudes de detención del ICE. Solo se hacen excepciones cuando se proporciona una orden judicial y solo para personas condenadas por uno de los aproximadamente 170 delitos violentos o graves o cuyos nombres aparecen en una lista federal de vigilancia terrorista. Otra ley de 2014 también eliminó una oficina del ICE de Rikers Island.
Una ley de 2017 prohíbe el uso de personal y recursos de la ciudad para la aplicación de las leyes de inmigración. Otra norma prohíbe en gran medida que los agentes de inmigración entren en propiedades de la ciudad que normalmente están fuera del alcance del público en general, como los refugios, sin una orden judicial.
Vivimos otra era
Cuando en 2017 el presidente Trump iniciaba su primer gobierno en la Casa Blanca, la ciudad de Nueva York no estaba bajo ninguna amenaza clara de organizaciones criminales conformadas por migrantes. La gran diferencia, es que ahora sí.
NYPD ha identificado a 41 pandilleros migrantes en la banda venezolana el Tren de Aragua, sin incluir una banda juvenil afiliada y otros asociados, que por sí sola acumuló 143 arrestos, con casi la mitad de los elementos en las localidades turísticas más concurridas de Manhattan.
Pero el alcance de la red va mucho más allá, con la pandilla afiliada denominada Los Diablos de la 42 y otros co-acusados, y la Uniformada cree que hay más de 200 miembros de esta pandilla aún por documentar.
“No es la misma discusión, ni el mismo momento. La Ciudad de Nueva York tiene un enemigo claro, que es una banda criminal muy peligrosa conformada aparentemente por personas que acaban de pasar la frontera. Nadie está hablando de abrir la puerta a deportaciones masivas, pero sí a operaciones de inteligencia que saquen de nuestra ciudad a los criminales”, reforzaron a El Diario fuentes municipales.
Legislaciones que protegerían a los migrantes
- El anteproyecto de ley Nueva York para Todos, prohibiría que todas las agencias policiales locales y estatales colaboren con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y la Patrulla Fronteriza y de Aduanas (CBP).
- La iniciativa Acceso a la Representación y la Equidad (CARE), una legislación que fue sometida hace cinco años garantizaría más fondos para proveer servicios legales a las familias migrantes, que corren el riesgo de ser removidas del país.
- Esta propuesta legal, que está siendo patrocinada por la asambleísta de Queens, Catalina Cruz, aspira que se destinen el próximo año $165 millones para extender acciones de representación legal, a quienes están en riesgo de entrar en el aro de la política federal, que se ha planteado remover en los próximos meses a más de 1.5 millones indocumentados.
Deportaciones NYC:
- 458 personas fueron deportadas de la ciudad de Nueva York durante el año fiscal 2023.
- 39% de estas personas tenían condenas penales. Históricamente, las condenas más comunes, según los datos de ICE, fueron posesión de drogas, agresión e infracciones de tránsito penales (no civiles), como atropellos y fugas o abandonar la escena de un accidente.
