Santo Domingo- La familia Faña López afronta una situación estremecedora tras el hallazgo de partes asociadas a Luz Divina Faña dentro del congelador de su residencia en Aruba.
Familiares reciben noticia inquietante
La comunidad de Nagua, especialmente en El Factor, kilómetro 5, quedó sorprendida al conocerse detalles vinculados con la separación de partes asociadas a Luz Divina Faña.
La información fue expuesta en recientemente por el periodista Ramón Tolentino durante el espacio Esto No es Radio, generando fuerte impacto entre quienes conocían a la señora.
Según lo narrado, el hallazgo ocurrió dentro de la vivienda donde Luz Divina residía desde hacía años, en un sector de Aruba frecuentado por amigos cercanos.
Los familiares describieron su vivencia como una “película de terror”, expresión utilizada para ilustrar la magnitud emocional del momento que enfrentan.

Luz Divina fue descrita como una mujer trabajadora, dedicada y reconocida en Nagua, donde mantenía comunicación constante con sus familiares.
Ella llevaba años residiendo en Aruba y decidió trasladar a Adrián cuando el joven tenía entre siete y nueve años, según datos comentados por Tolentino.
Comunicaciones interrumpidas generan preocupación
Los parientes notaron algo inusual cuando pasaron tres días sin recibir llamadas, pues ella solía comunicarse dos o tres veces diariamente.
Amigos acudieron a la casa de la señora en Aruba para verificar su ausencia y luego visitaron su espacio laboral en busca de información adicional.
En el trabajo, les dijeron inicialmente que estaba de vacaciones en República Dominicana, versión que resultó extraña para su jefe inmediato.
El supervisor expresó dudas porque ella no había anunciado ninguna pausa laboral, especialmente considerando la condición delicada de su madre en República Dominicana.
También se destacó que Luz Divina no acostumbraba comunicarse por mensajes, ya que siempre prefería realizar llamadas mediante WhatsApp o internet.
Autoridades intervienen la vivienda
Ante las inquietudes, las autoridades de Aruba obtuvieron una orden para ingresar a la vivienda y realizar una verificación detallada del lugar.
Tras esa gestión, Adrián Faña, de aproximadamente diecinueve años, fue identificado como la persona involucrada en la pérdida de la señora.
Se afirmó que existen grabaciones donde aparece introduciendo partes asociadas a la señora dentro de la nevera ubicada en la residencia.
El joven fue descrito como alguien de interacción social limitada, sin amistades conocidas y con comunicación centrada únicamente en Luz Divina.
Estos datos fueron mencionados por Tolentino al relatar la dinámica cotidiana que, según él, mantenían la señora y su hijastro en la isla.
Las descripciones ofrecidas formaron parte del recuento presentado en el programa, donde se compartieron detalles basados en los relatos recibidos.
El caso continúa generando conversaciones debido a la cercanía entre ambos y a la abrupta interrupción de las comunicaciones habituales de la señora.
La familia en Nagua permanece atenta a las informaciones suministradas desde Aruba mientras procesan el impacto emocional que rodea esta situación.
El relato compartido por Tolentino resume las inquietudes familiares y la secuencia de acciones emprendidas para localizar a la señora.
Las referencias a su dedicación, así como a la relación con Adrián, se mencionaron como elementos recurrentes dentro de la historia expuesta.
La inquietud inicial se transformó en una indagación marcada por la ausencia de respuestas directas durante los primeros días de silencio.
La secuencia de hechos relatados por Tolentino continúa siendo parte del diálogo público mientras se esperan nuevas precisiones oficiales.