Santo Domingo. -Todavía esta tarde se reflejaba el dolor en el rostro de cada una de las personas que tienen a por lo menos un familiar en aquella explosión en mercado viejo de San Cristóbal aquel fatídico 14 de agosto.
Modesta Mateo, pariente de las victimas indicó que “Ni siquiera el cadáver, nada de nuestro familiar, eso es grande, eso es vivir día y noche como si no estuviéramos vivos”
El desconsuelo se mezclaba con la impotencia contra el Estado, cuya justicia no tiene procesados a los responsables del siniestro, que este miércoles 14 de febrero cumple seis meses.
“Para mí todos los días son dolor, lloro todos los días, y la noche. Yo no tengo propia vida, yo morí con mi hijo”, expuso Judit Montero.
Asimismo, Yovanny Brea expresó que no han tenido paz “yo perdí mi hija y esto ha sido lo más grande para mí, eso nada más lo sabe Dios, uno ver perder un hijo que uno sabe que por ley de vida tiene que irse primero, y uno ver perder un hijo, yo siento que mi vida se acabó”.
En medio de su desesperación los afectados llamaron a las autoridades irresponsables e indolentes a su dolor.