A pocos días de las elecciones parlamentarias venezolanas convocadas por la dictadura de Nicolás Maduro, este lunes el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) chavista, Diosdado Cabello, lanzó una fuerte amenaza a la población con el objetivo de que concurran a las urnas para participar de los comicios que no cuentan con el reconocimiento de gran parte de la comunidad internacional.
“El que no vota, no come. Para el que no vote, no hay comida. El que no vote, no come, se le aplica una cuarentena ahí sin comer”, sostuvo el dirigente chavista, durante un acto de campaña del Gran Polo Patriótico en el estado Carabobo.
La amenaza de Cabello está principalmente dirigida a los sectores más vulnerables del país, que en gran medida dependen de las ayudas provistas por el Estado.
Pese a la falta de reconocimiento internacional, y a la negativa a participar por parte de la oposición liderada por Juan Guaidó, la dictadura de Maduro celebrará de todas formas las elecciones parlamentarias el próximo 6 de diciembre. Ante este contexto, la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) reiteró este lunes que los comicios, considerados un fraude, agravarán la crisis que vive el país caribeño.
“Ratificamos lo que anteriormente señaláramos al decir que el evento electoral convocado para el próximo 6 de diciembre, lejos de contribuir a la solución democrática de la situación política que hoy vivimos tiende a agravarla”, reza un comunicado de la CEV.
Además, subrayan que estos comicios “no ayudarán a resolver los verdaderos problemas del pueblo”.
La Conferencia Episcopal también envió un “llamado urgente a todos quienes dedican sus esfuerzos a la política y a las diversas organizaciones de la sociedad civil a fin de continuar haciendo esfuerzos en conjunto para restablecer los derechos democráticos de la nación”.
En este sentido, la CEV considera “necesarias e importantes” todas las iniciativas, entre ellas la consulta popular a la que ha convocado Guaidó.