“No es una ola, es un tsunami”, había advertido el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, al referirse a la situación sanitaria del distrito, que pasó de tener 2.500 casos diarios a 10.000 en las últimas tres semanas. “No es sólo lo súbito o la velocidad, sino la magnitud”, enfatizó frente al avance del COVID-19.
Además de ser uno de los primeros mandatarios provinciales en señalar que la segunda ola sería más devastadora, fue el pionero en dejar allanado el camino para imponer más restricciones si la situación se sale de control.
De hecho, a través del decreto Nº 178/2021, publicado el viernes como Suplemento del Boletín Oficial, Kicillof facultó a su Jefe de Gabinete, Carlos Bianco, a ampliar el horario de prohibición de la circulación nocturna y a suspender las clases en caso de que los índices epidemiológicos así lo requieran.
Si bien el decreto firmado por el presidente Alberto Fernández establece que la restricción para circular rige entre las 0 y las 6 horas, Kicillof adelantó que podría ampliar dicho horario siempre y cuando el plazo de prohibición no supere las 10 horas.
Agentes de diferentes fuerzas de seguridad establecieron controles el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) para asegurar el cumplimiento de las restricciones a la circulación nocturna impuestas frente a la segunda ola de coronavirus (Foto: Télam)
“Facultar al Ministro Secretario en el Departamento de Jefatura de Gabinete de Ministros, en atención a las condiciones epidemiológicas, a disponer la ampliación del horario establecido en el artículo 18 del Decreto Nacional N° 235/21, siempre que el plazo de restricción de circular no supere el máximo de DIEZ (10) horas”, sostiene el artículo 4 de su comunicado.
Esta medida recaería, principalmente, en las jurisdicciones que se encuentran en Fase 3 como Campana, Cañuelas, La Plata, Lanús, La Matanza, Malvinas Argentinas, San Isidro, Pilar, Quilmes o Tandil, entre otras.
El documento también faculta de manera conjunta al Jefe de Gabinete y a la Directora General de Cultura y Educación, Agustina Vila, a suspender en forma temporaria las clases presenciales, así como a reiniciarlas, en función de la evaluación del riesgo epidemiológico.
“Las disposiciones del presente artículo son de aplicación para todo el sistema educativo público, que comprende la gestión estatal y la gestión privada, conforme lo establece la Ley N° 13.6882”, señala el artículo 3.
Y agrega: “En aquellos casos en que resulte necesario disminuir la circulación de personas con el fin de evitar la propagación del virus SARS-CoV-2 y sus variantes, se deberán implementar políticas sanitarias que prioricen el funcionamiento de los establecimientos educativos con modalidades presenciales”.
Las clases presenciales podrían volverse virtuales en el caso que la situación epidemiológica lo amerite
Con respecto al horario de apertura de los comercios, Kicillof estableció diferencias de acuerdo a las fases en las que se encuentran las distintas jurisdicciones.Las que están Fase 3 deben cerrar a las 20 y abrir a las 6 de la mañana, los que están en Fase 4 (con menos contagiados) la restricción es entre las 0 y las 6 de la mañana, mientras que las que están en Fase 5 no pueden funcionar de 2 a 6 de la mañana.
Antes de conocerse esta resolución provincial, el viceministro de Salud bonerense, Nicolás Kreplak había adelantado que las medidas adoptadas por Nación eran mínimas y que podría haber cambios. “Las medidas que se han tomado posiblemente son las iniciales. Se restringieron las actividades que evidentemente había que restringir y ahora habrá que ver si eso es suficiente”, aseguró, al ser entrevistado en Radio Provincia, dejando abierta la puerta a lo que vendría después del 30 de abril.
En ese contexto, Kicillof señaló que se aplicarán “severas multas por incumplimientos”, dijo que ese sistema sancionatorio requerirá de adhesión municipal y pese a que planteó que “habrá seguimiento, control y sanciones”, remarcó que “no puede haber un policía al lado de cada persona”, por lo que pidió “colaboración y conciencia” a los ciudadanos.
“Hay que parar los contagios, porque más contagios, son más internaciones y más muertos. Corremos el peligro de que se sature el sistema sanitario. Si no se hace nada, no hay sistema que aguante, ni siquiera en el primer mundo”, manifestó.
Tras enumerar las medidas que adoptaron otros países tanto europeos como latinoamericanos, que van desde toque de queda, suspensión de clases presenciales y concurrencia a oficinas, hasta prohibiciones de mantener reuniones, Kicillof expresó: “Nada nuevo bajo el sol: llega la segunda ola y hay que tomar medidas duras”.
Organismos sanitarios bonaerenses pidieron más restricciones
El comunicado completo
Los subsectores de la salud privado, público y de la seguridad social difundieron un comunicado en el que advirtieron que “el sistema de salud tiene un limite” y manifestaron acompañar las medidas adoptadas por el Gobierno nacional como punto de partida para intentar frenar los casos.
“Hoy, la ocupación promedio de camas en el AMBA alcanza el 69,2%, cuando hace solo dos semanas la ocupación era del 56,5%, aclarando que estas cifras promedio representan que haya ya muchos centros de salud arriba del 90% de ocupación”, subrayaron los organismos.
Y ante este contexto, coincidieron: “Estamos convencidos que, en este escenario de emergencia sanitaria, es necesario tomar medidas más drásticas para reducir la escalada en la transmisión de manera rápida y contundente. A este ritmo, no hay sistema de salud que aguante”.
Teniendo en cuenta que esta semana el récord de casos superó los 24.000, pidieron responsabilidad en toda la sociedad para que se respeten los cuidados necesarios, tomar consciencia y ser solidarios ante las salidas y el contacto con otras personas.
“El sistema de salud tiene un límite y, con el correr de los días, vemos que estamos cada vez más cerca de alcanzarlo”, sostuvieron y, en esa línea, consideraron “imperioso” conocer a diario las cifras reales y exactas de la evolución del desempeño del sistema de salud, tanto público como privado, “porque esto también aporta a la toma de conciencia por parte de la sociedad de lo dramático de la situación que afrontamos”.
“Necesitamos urgente que la situación se controle, para evitar las imágenes que vemos en el mundo y en la región con hospitales colapsados”, insistieron.
La postura fue apoyada por el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, que difundió el escrito en su cuenta de Twitter: “Comparto el revelador comunicado que pone en alerta sobre la situación crítica que vivimos en este momento”, escribió el funcionario adjuntando el texto.